El 8 de septiembre de 1936 fue un día aciago para el municipio gaditano de Conil de la Frontera. Una fecha que marca el rodaje de Aquella feria vestida de luto, el primer documental del realizador montillano Dany Ruz que, junto a un equipo formado por profesionales del sector audiovisual y numerosos voluntarios del municipio, han querido «conservar para la posteridad» los testimonios de muchos vecinos que, pese al tiempo transcurrido, aún mantienen vivo en la memoria el horror de la represión.

Con una población cercana a los 7.000 habitantes en la pasada década de los años treinta, Conil de la Frontera formó parte de la retaguardia controlada por golpistas y sublevados desde los primeros días del golpe de Estado. La aplicación del bando de guerra a partir del 21 de julio de 1936 tuvo como primera consecuencia el colapso de la legalidad republicana vigente.

«El 8 de septiembre de 1936 se hizo una saca de un improvisado calabozo, referido como El Granero, y se asesinó a siete personas», explica Dany Ruz, quien añade que días más tarde fueron asesinados otros dos hombres más, que habían sido detenidos en el campo y, finalmente, el Día de la Inmaculada, «mataron a un muchacho a quien sus padres habían estado acompañando cada noche desde su reclusión en julio».

El documental cuenta con la financiación colectiva obtenida por la plataforma Goteo, y será desarrollado por la productora Atrapasueños SCA. «El Ayuntamiento de Conil colabora con los permisos y las cuestiones ligadas a la producción de los rodajes y otras cuestiones logísticas», explicó Ruz.

«Queremos que este documental nos hable de un futuro en el que defendamos los principios democráticos de la convivencia y el respeto a los Derechos Humanos, que sea un material útil para difundir la memoria en diferentes lugares y formatos», resaltaron desde la productora.

La cinta, que se estrenará el 14 de abril de 2022, contará con la participación de numerosos vecinos, historiadores y familiares de las víctimas. «Serán cerca de treinta personas», precisó Dany Ruz, quien elogió que «el proyecto, desde su nacimiento, se ha concebido como algo colectivo».