Hace muchos años que José Sabán Ruíz tuvo que despedirse de Córdoba, su ciudad natal, y marchar a Madrid para continuar con sus dos grandes pasiones: la música y la medicina. Y es que este amor por la música lleva acompañándole desde muy temprana edad. «Yo empecé muy jovencito. Tanto mi hermano como yo tuvimos la suerte de tener un abuelo que tocaba la guitarra y nos fue introduciendo en el mundo de la música», dice el guitarrista rememorando sus jóvenes años en Córdoba. 

Sin embargo, y a pesar de haberse jubilado recientemente un tanto «obligado», la música forma parte de él «como si fuera un brazo o una pierna, como si fuera un elemento esencial». Es por ello que en su faceta artística continúa creando melodías e impulsando proyectos, sin abandonar su entrega y dedicación a la medicina y al endotelio. Y a la vista está de que es así.

El guitarrista cordobés, también médico y fundador de la Unidad de Endotelio y Medicina Cardiometabólica del hospital Ramón y Cajal de Madrid, ha publicado recientemente, junto a Dr.J & The Saban Jazz Band, que así se llama su banda, Beatles Forever, un disco doble con nada más y nada menos que 25 temas versionados en clave de jazz y swing de los siempre eternos The Beatles. 

Sabán ha dedicado cinco años a la elaboración de este proyecto discográfico, que se ha convertido en todo un éxito y ha recibido muy buenas críticas. Además, lo que comenzó siendo una locura ha acabado convirtiéndose en un modo de financiar la investigación del endotelio y, curiosamente, su estrecha relación con el virus del covid. 

Beatles Forever es un auténtico festín musical ya que, gracias a las legendarias melodías de temas tan aclamados como Yesterday, Here comes the sun o Michelle, se redescubren las canciones de los cuatro de Liverpool al más puro ritmo del jazz. Y es que este género, como dice el médico cordobés, «es libre, es libertad», y razón no le falta. José Sabán es sinónimo de música, algo que queda patente en la emoción con la que describe su frenética vida «entre dos aguas». «Cuando más agobiado he estado en mi vida de médico, más he necesitado a la música, porque sin ella no era capaz de llegar al día siguiente. Gracias a la música yo he sobrevivido a la medicina. Las necesito y siempre las necesitaré. Siempre seré músico y siempre seré médico», señala.