POESÍA

Criaturas del momento

Rafael Espejo.

Rafael Espejo. / CÓRDOBA

Jorge Díaz Martínez

La prolija descendencia de la poesía figurativa de los ochenta (según acuñación de Luis Antonio de Villena) sigue ofreciéndonos frutos muy dispares, la mayor parte epígonos sin gracia. No obstante, entre la muchedumbre antologada podemos distinguir, como decía Antonio Machado, algunas voces personales. Una de ellas es, sin duda, la de Rafael Espejo (Palma del Río, 1975), quien vuelve a la palestra con su quinto poemario: Criaturas del momento (Pre-Textos, 2023), merecedor del III Premio de Poesía Francisco Brines, uno más en la serie de reconocimientos que jalonan su estela literaria, entre otros, el Federico García Lorca de la Universidad de Granada en 1995, el Hiperión en 2001 y el Emilio Prados en 2008.

Rafael Espejo vuelve y sigue siendo él mismo: sus poemas, no obstante, sí han cambiado, no tanto en la factura técnica de los versos como en su discurso íntimo, las cosas que nos cuenta. Me refiero, en especial, al tema universal de los lazos familiares y su caducidad; un rasgo generacional que vincula a esta obra con las últimas entregas de otros escritores, más o menos, de su quinta, tales como Carlos Pardo, Juan Antonio Bernier, Andrés Neuman, Erika Martínez o Xavier Guillén. En todos ellos, el desapego de la juventud ha dado ya lugar a una insoslayable madurez, la cual trae aparejada una sentida reflexión acerca de los vínculos de sangre, las raíces rurales y la inevitable pérdida de los seres queridos, un asunto que ocupa ya un lugar central entre las páginas de esta generación.

La otra línea que guía este poemario es la de la disertación filosófica infantil acerca de esas preguntas fundamentales de la existencia que acostumbramos a enterrar bajo el ajetreo de lo consuetudinario, pero enunciadas aquí al calor de una madurez comprometida, coherente con los límites de su propia conciencia, a la que la experiencia de la muerte cercana y el propio deterioro ha dotado de fondo quevedesco. Preguntas que suceden, de nuevo, en un ambiente campestre y familiar, con la mirada atenta a las constelaciones, con perros, chimenea, frutales y paseos. Nada que ver con el desparrame bohemio de sus primeros libros hedonistas. Aquí encontramos poemas dedicados a un vaso de agua, a las macetas del patio, a las mascotas --también perecederas--, a una hogaza de pan y, por supuesto --al igual que Walt Whitman--, a sí mismo. Aunque, en realidad, todos estos poemas son excusas para hablar de otras cosas. De esta manera, Rafael Espejo acompaña a un punto medio al anciano y al niño, la razón taxonómica y la imaginación lúdica, la circunvolución sedimentada y la capacidad de asombro.

En todo caso, estas indicaciones no alcanzan a resumir el universo impreso en dichas páginas, ni menos la emoción que alienta en sus poemas; no son su sustituto, solo una invitación a su lectura. No hay una sola cita en todo el libro: todo el libro es una sola cita.

‘Criaturas del momento’

Autor: Rafael Espejo.

Editorial: Pre-Textos. Valencia, 2023. 

Suscríbete para seguir leyendo