La comunidad gitana apuesta por dar mayor visibilidad a su cultura

La comunidad gitana de Priego celebraba ayer con distintos actos el 8 de abril, Día Internacional del Pueblo Gitano, efeméride en la que se recuerda la celebración en Londres, el 8 de abril de 1971, del primer congreso mundial romaní/gitano en el que se instituyeron la bandera y el himno gitano.

Ante una nutrida afluencia de público, contándose también con la presencia de numerosos miembros de la Corporación municipal, las Carnicerías Reales acogían a mediodía el primero de los actos programados. Durante los discursos, los representantes de la comunidad gitana y los ediles que tomaron la palabra reivindicaron el derecho al reconocimiento y a la igualdad del pueblo gitano, coincidiendo igualmente en señalar la importancia de la celebración de este tipo de actos.

Posteriormente, dos jóvenes daban lectura a un manifiesto en el que se recordaba el origen de la celebración del 8 de abril, así como el significado de la bandera instituida en el congreso de Londres. Una enseña verde y azul, simbolizando el cielo y el campo, con una rueda de carro roja en el centro, que simboliza el camino desde la India y la libertad, concluyendo el acto con el himno gitano «Gelem, gelem» (Anduve, anduve), compuesto por Jarko Jovanovic y que recuerda a los gitanos y gitanas víctimas del nazismo.

Posteriormente, también en Carnicerías Reales, tenía lugar la inauguración de la exposición de vestidos de novia de la firma Mammen García, al frente de la que se encuentra el prieguense Daniel Jiménez Carmona, un joven creador que, de forma autodidacta y gracias a su afición a la costura, ya cuenta con un nombre dentro del mundo de la moda gitana, con trabajos en distintos países de Europa y un futuro ciertamente prometedor. La exposición, en la que se incluyen trajes de novia, de pedida y de fiesta, puede visitarse hasta el próximo 16 de abril en el horario habitual de apertura de las Carnicerías Reales.

Para completar la jornada, la Ciudad Deportiva Carlos Machado acogía un partido de fútbol amistoso entre la comunidad gitana de Priego y miembros de la Corporación municipal, donde lo menos importante, como se puso de manifiesto a lo largo del disputado encuentro, era el resultado, ya que la razón de ser de este original enfrentamiento era la recogida de alimentos no perecederos que se llevó a cabo en el acceso al recinto deportivo y que posteriormente se entregaron a Cáritas.