Tensión en la zona del Zarpazo por sufrir algunos vecinos ataques de okupas

La extendida ocupación ilegal de pisos de promoción pública en El Zarpazo de Lucena está generando angustiosos episodios de temor y sobresaltos entre algunos vecinos.

El frustrado intento de entrega de una vivienda a una familia inscrita en el registro de demandantes del Ayuntamiento ha estado precedido de la reacción violenta y descontrolada de algunos individuos instalados por medios violentos en estos inmuebles. Alguno de los vecinos han relatado que, en la tarde del pasado lunes, el nuevo inquilino de un piso otorgado por la Junta padeció una grave agresión, primero, al tratar de tomar posesión del domicilio. Posteriormente, los autores de las lesiones lo persiguieron hasta el centro de salud donde volvieron a proferirle varios golpes. Esta tesitura ha originado la renuncia de la familia concesionaria.

Desde el colectivo vecinal narran contextos diarios de «agresiones y amenazas de muerte» y, sobre todo, trasladan la alarma por «el miedo» inoculado sobre «los niños».

Acerca de la acción de la Agencia de la Vivienda de la Junta de Andalucía (AVRA), censuran su «dejadez importante» porque, por ejemplo, rechazaba ejercer «un desahucio colectivo».

Fuentes municipales exponen que estos episodios están más relacionados con la seguridad ciudadana que con la propia ocupación y defienden «la colaboración» y el «trabajo conjunto» con AVRA, materializados, por ejemplo, en «la rápida actuación» al colocar «la puerta antiokupa», esta semana, una vez abandonaron los intrusos el domicilio asignado a la víctima de la agresión. Estas fuentes sostienen que persiste un número reducido de pisos ocupados ilegalmente.