Habitantes de la localidad de llegada: 20.245 (en 2021).

Dormir (convenio con la Federación del Camino): Pensión Guerrero. C/. Pepita Jiménez, 7. Plazas: 12. 957520507 y 675934446. 28 euros. Hay otra considerable oferta de alojamiento.

Comer: Notable oferta hostelera.

Transportes: Estación de autobuses 957524224. Radio-taxi Granados 659909278. Francisco Corpas 957 52 05 36.

Policía Local: 957520319.

Ayuntamiento: 957520050.

Hospital Infanta Margarita: 957021300.

Seguridad: APP Alertcops.

Muy cómoda etapa de 13 kilómetros siguiendo la Vía Verde del Ferrocarril del Aceite, para lo que, lógicamente, tendremos que dirigirnos dentro de Lucena hacia la antigua estación, donde nos esperan las flechas amarillas para guiarnos sin pérdida hacia Cabra. Todo un ejemplo de una infraestructura moderna (al menos comparada con la antiquísima red de vías romanas que marcaron la Bética) e incorporada a la red jacobea europea de la mano del trazado de un tren perdido, pero cuyo trazado se ha reconvertido en patrimonio natural, cultural, de ocio e histórico de la provincia, desde ese Puente de Hierro que salva el arroyo Losilla o los pasos de los arroyos Guadalazar y de la Huerta de Oliva.

Lucena-Cabra

Peregrinando a todo ‘antiguo’ tren

Y es que desde Lucena hasta Cabra y Doña Mencía, el ramal del Camino Mozárabe de Málaga coincide con una vía verde acompañada de flechas amarillas peregrinas ya desde la antigua Estación de Lucena. El caminante puede plantearse, incluso, unir etapas para continuar hasta Doña Mencía (siguiente parada, a 13 kilómetros) pero… más puede contar del Camino la tortuga que la liebre y, además, perderse Cabra no tiene sentido. En primer lugar, porque en el camino no es difícil imaginar las villas rústicas romanas que salpicaban el paisaje de Igabrum, algunas de ellas hitos como, al noroeste de Cabra y fuera del itinerario, la Villa del Mitreo en Las Pozas, en Fuente de las Piedras. Allí se encontró una escultura de Mitra (hoy en el Museo Arqueológico de Córdoba) que nos lleva a preguntarnos qué hubiera sido de Occidente si aquella otra religión oriental se hubiera impuesto, como a punto estuvo de ocurrir, al cristianismo. Y es que el Camino da mucho que pensar.

Naturaleza. Vía Verde del Aceite

Una vez dentro de Cabra, todo son sorpresas: desde el Museo del Ferrocarril, que recibe al peregrino en la localidad, hasta el Museo Municipal, con restos desde el Paleolítico en adelante, pasando por calles, palacios, iglesias (comenzando por la de La Asunción), conventos, retablos e imágenes con historia y arte desde que la Villa Vieja fuera un asentamiento ibérico hasta nuestros días. Y todo ello en la que quizá es la población de su relevancia que más veces cambió de dueños entre Omeyas, rebeldes al emirato, taifas de Sevilla y Granada, reyes de Castilla, nazaríes… Tierra de frontera en la que, al contrario de lo que suele ocurrir, no es reflejo de la destrucción, sino un lugar llamado a conservar mucho bueno de todos.