Volvieron las Cruces de Añora y con ellas una manera única e incomparable de adornarlas o vestirlas con el trabajo de meses, elaborando minuciosamente los adornos artesanos, repletos de detalles sorprendentes. Tan importantes son las cruces para los noriegos que estos cuentan lo mal que lo pasaron los dos años en los que no pudieron celebrar su fiesta y lo contentos que están por haberla recuperado.
El sábado por la tarde quedaron las cruces terminadas y montadas y empezó por la noche la Velá en la que miles de personas se acercaron a la localidad para ver el resultados de estas cruces vestidas con tonos blancos o claros y que pueden ser de exterior, en las de granito repartidas por distintos rincones y calles de la localidad o de interior para lo que se emplean habitaciones de casas para componerlas, con el remate de las cruces de oro, aportadas por el vecindario.
A las 3.30 horas de la madrugada, se sumó la puntuación de cada cruz y la del jurado externo. Ese momento, en la Casa de la Cultura, estuvo lleno de expectación pues ahí se deciden los premios.
De entre las ocho cruces exteriores, el primer premio fue para la cruz de San Pedro, con 104 puntos; seguida de calle Virgen con 84 y Cruz de Arriba con 80 puntos. De las cuatro de interior, el primer premio fue para la situada en la calle Andalucía con 50 puntos y que incorporaba elementos en movimiento, con la de la calle Dr. Benítez, 26 en segundo lugar con 42,5 puntos y la de esquina calle Olivos con Concepción en tercer lugar con 42 puntos.
La cruz de San Pedro obtuvo el primer premio en exteriores y la de la calle Andalucía en interiores
Hasta llegar al momento de los premios la Velá contó con mucho ambiente y personas llegadas de toda la provincia de Córdoba, de Badajoz, Sevilla, Ciudad Real o Madrid, entre otros lugares. La tuna de Peñarroya y la Coral Nuestra Señora de la Peña fueron cantando por las cruces en una noche agradable de temperatura. En la Plaza España, la orquesta La Clave puso a bailar a los asistentes y además se podían visitar las exposiciones de fotografía del reportero gráfico de Diario Córdoba, Rafa Sánchez, llamada «Nuestra dehesa» en la ermita de San Pedro, y del pintor Juan Bautista Escribano, en el salón de plenos del Ayuntamiento.
Coincidiendo con la medianoche el Ayuntamiento repartió chocolate caliente y dulces en dos lugares de la localidad.
En las cruces, el papel de las mujeres noriegas es crucial, aunque también se vienen incorporando algunos hombres. Ellas se juntan en casas deshabitadas o locales para elegir el diseño y empezar a elaborar los adornos. La tarea se desarrolla «en secreto» hasta el día de la fiesta.
Se trata de cruces únicas, fruto de meses de trabajo, lo que le ha valido la declaración de la Junta como BIC
Las cruces, que desde este año cuentan con la declaración de Bien de Interés Cultural en la categoría de patrimonio etnográfico, se pueden seguir disfrutando este domingo y también mañana lunes.
El alcalde de Añora, Bartolomé Madrid, destacó el mantenimiento de las cruces de balcón y la programación preparada por el consistorio que este domingo incluirá a la orquesta Panorama.