Las obras de consolidación y restauración de la ladera sur de la muralla del barrio histórico de la Villa de Cabra están entrando en su recta final, ya que para el próximo mes de junio se espera que concluyan unos trabajos de gran envergadura cuya primera de las tres fases previstas se inició en enero del 2015 y ahora están ultimándose en la que es su segunda etapa, tras comenzar en junio del pasado año. Para ello ha contado con una inversión que ha superado los tres millones de euros, para la que el Consistorio ha necesitado la ayuda de todas las administraciones, permitiendo no solo recuperar un destacado elemento patrimonial como es la muralla medieval, sino también dar tranquilidad a los vecinos de esta zona del barrio por lo que de peligrosidad suponía. Así, podía ser peligroso para su seguridad personal y para sus viviendas, colindantes a la ladera en una zona donde también está prevista la reconstrucción, en la calle Ana de la Rosa, de un muro medieval que se desplomó hace un tiempo. Para ello, el Consistorio cuenta con una subvención de 35.000 euros de la Diputación Provincial de Córdoba, como ha informado el alcalde, Fernando Priego.
A los trabajos de esa segunda fase, que ahora están concluyendo, seguirá una tercera fase de puesta en valor, que se sucederá a lo largo del próximo año y que será financiada con los fondos Edusi. Los trabajos comenzarán en la parte inferior de la ladera que linda con la calle Tinte, donde el Ayuntamiento ha adquirido una parcela urbana que dará cabida a un recorrido peatonal por dicho entorno, con el objetivo de hacerlo atractivo para los visitantes.
Toda esta actuación pone punto y final al problema de una parte de este barrio histórico, desde que, al menos, a mediados de la década del año 2000 comenzaran a aparecer los primeros movimientos de tierra en dicha ladera.
Esta misma solución se espera dar para la ladera norte. En este sentido, y tal y como el primer edil informaba, en estos momentos se están realizando las comprobaciones previas de la titularidad del terreno y, una vez que estas concluyan, se dará vía libre a unas obras también de gran envergadura, para las que el Gobierno central aportará 2 millones de euros y el Consistorio otros 500.000 euros.
Y es que esta zona presenta serios problemas estructurales derivados de la existencia de una falla geotectónica en este enclave, donde, además de una zona de viviendas, se encuentran afectados también una serie de elementos destacados del patrimonio histórico egabrense y que afectan, sobre todo, al castillo de los condes de Cabra, hoy sede del colegio San José de la comunidad escolapia; la iglesia conventual de Capuchinos y al contiguo convento de las Franciscanas, ubicado en un palacete de estilo neomudéjar de principios del siglo XX.
Para esto, el 26 de abril del pasado año el alcalde de Cabra mantuvo una primera reunión telemática y de toma de contacto con el secretario general de Agenda Urbana y Vivienda, David Lucas, para tratar de comenzar el mencionado proyecto de consolidación de la ladera, a la que siguió ya otra reunión de carácter técnico, que sirvió para ir definiendo lo que se va a hacer.
