La Diputación de Córdoba y la Fundación Prode vuelven a colaborar, en esta ocasión, en el proyecto El Dehesafío, una iniciativa que tiene como misión contribuir a la sostenibilidad de la dehesa de Los Pedroches mediante la plantación de encinas en las fincas colaboradores, la difusión de los valores de la dehesa en la población escolar, y la incorporación de personas con discapacidad al entorno laboral. En esta ocasión esta colaboración permitirá la siembra de 110 encinas en la Estación de Peñas Blancas, junto a la vía verde de la Minería de Villanueva del Duque, con un plazo de ejecución de 14 meses.

El presidente de la institución provincial, Antonio Ruiz, ha manifestado que «volvemos a mostrar nuestro apoyo a este colectivo, con este proyecto que aglutina varias actividades y que redunda en un objetivo compartido por esta Diputación, el desarrollo personal y profesional de personas con incapacidad intelectual».

Del mismo modo, ha continuado Ruiz, «con la firma de este acuerdo, estamos contribuyendo a proteger y conservar el entorno natural de esta zona de la provincia, a través de la siembra de plantas autóctonas». Asimismo, ha enfatizado el máximo representante de la Corporación provincial, «estamos fomentando la creación de empleo, generando riqueza y ayudando a la fijación de la población al territorio, en una zona que sufre la despoblación, y que desde esta Diputación estamos convencidos y comprometidos con implementar en todas aquellas políticas que vengan a luchar con este reto».

La Diputación de Córdoba, a través de la Delegación de Medio Natural y Carreteras, subvenciona este proyecto con 10.000 euros. El responsable del área, Francisco Palomares, ha reiterado que «este proyecto es una oportunidad de recuperar este entorno natural tan privilegiado, como es nuestra dehesa, que debemos proteger entre todos».

Desde su puesta en marcha, el proyecto El Dehesafío ha contribuido a la regeneración del arbolado de la dehesa de Los Pedroches mediante la plantación de más de 1.100 nuevas encinas en 25 explotaciones y en terrenos de la dehesa boyal de Pozoblanco. En el futuro se prevé incrementar estas actuaciones para conseguir que la regeneración del encinar se incorpore a las actividades que se realizan cada año en las dehesas. La Fundación Prode, con sede en Pozoblanco, se creó en el año 1984 con el reto de generar calidad de vida y bienestar para las personas con discapacidad intelectual y sus familias.