Más de 5.000 personas han disfrutado este fin de semana de la vigésimo tercera edición de la Cata del Vino de Moriles, que ha podido revivir el eslogan de la cata Sueña Moriles. Estas fechas forman parte ya del calendario otoñal como cita ineludible para los amantes del buen vino de este pueblo que da nombre a un vino de reconocido prestigio internacional.

La alcaldesa de Moriles, Francisca Carmona, hace balance de la Cata del Vino con gran satisfacción, destacando que "no esperábamos tanto, pues han sido más de 5.000 personas las que nos han sorprendido satisfactoriamente con su visita, que han sabido compartir unos momentos que quedarán en la retina de todos nosotros". Como dato que corrobora el interés despertado por esta cita, la alcaldesa asegura que se han agotado los más de 3.000 catavinos previstos para el certamen. Carmona apunta que el nuevo formato de cata presencial en las bodegas ha sido "un éxito rotundo, pues el visitante ha estado a pie de bota y viñedo disfrutando de lo mejor que sabemos hacer en nuestro pueblo, el vino”.

Un grupo de participantes en la cata celebrada en Moriles. J.A.F.

Carmona ha destacado la "colaboración de todos, pues hemos disfrutado de un civismo excepcional en todos los enclaves de la cata”. Por otro lado, destaca el esfuerzo de los bodegueros, que "han extremado todos los detalles para satisfacer al visitante, han vestido sus bodegas de gala, como debe ser, y así hemos conseguido que todos se lleven un recuerdo entrañable de nuestras bodegas y lagares”. Carmona señala que, “sin lugar a dudas, este nuevo formato presencial en las bodegas para la Cata del Vino ha venido para quedarse”.

En su balance Carmona felicita a todos cuantos han participado en el éxito de esta Cata del Vino que, bajo el paraguas de Expo wine Moriles, ha aglutinado y representado a los vinos de las bodegas, lagares y cooperativas de Moriles incluidos en la Denominación de Origen Montilla-Moriles, y, además, destaca que "se ha disfrutado de un extraordinario foro profesional" del sector vitivinícola de la zona en sus Jornadas Técnicas Profesionales Vitivinícolas.

La alcaldesa señala que este año Moriles "se ha vestido de gala para acoger esta edición, con este formato, en el que las catedrales del vino, nuestras bodegas, donde se recoge toda la esencia de nuestros viticultores y bodegueros, han sabido responder tras casi dos años de pandemia y de paralización de mercados".

Cabe destacar que todas y cada una de las bodegas participantes ha abierto sus puertas al visitante para ser conocidas in situ. De esta manera se ha podido realizar un tour de bodegas de Moriles pudiéndose visitar, en los horarios establecidos hasta completar aforos, las ocho bodegas, cooperativas y lagares participantes de esta edición, como son las Bodegas San Pablo, Lagar de Casablanca, Bodegas Doblas, Cooperativa Vitivinícola de San Jerónimo, Lagar de El Monte, Cooperativa Virgen del Rosario, Bodegas Los Gabrieles y Lagar de Los Frailes.

La gastronomía, la restauración y el enoturismo han demostrado ser aliados estratégicos del vino, e, igualmente, han tenido con su ocupación total de plazas hoteleras un papel notable en este evento organizado por la Ayuntamiento de Moriles y la Asociación de Bodegas de Moriles. Esta cita ha sido pensada como punto de encuentro y de negocio para todos los amantes del vino y para los profesionales vinculados a este mundo, con el objetivo de aunar esfuerzos y potenciar este producto en sus facetas económica, social y cultural.