El cementerio de Villaralto cuenta desde este sábado con un monolito que rinde homenaje a «los que murieron defendiendo la libertad y la democracia», tal y como refleja su texto en el que se concreta el periodo entre 1936 y 1975. 

Una iniciativa del Ayuntamiento, cuyo alcalde, Ángel Moreno, señaló que «es un error mirar al pasado ideológicamente, en lugar de hacerlo desde la conciencia» y añadió que «hay que descontaminar el pasado, saber lo que pasó realmente y unirse a partir de ahí, sobre bases diferentes».

El alcalde destacó «el espíritu de concordia y respeto» de este homenaje y agradeció la asistencia de colectivos, vecinos, alcaldes de la comarca y representantes políticos. 

El delegado de Memoria Democrática de la Diputación, Ramón Hernández, anunció que 30 ayuntamientos de la provincia contarán con homenajes similares e indicó que «el de Villaralto es el primero que se lleva a cabo», con el respaldo de la institución provincial.

En el acto, dos niños realizaron una ofrenda floral, intervino el párroco, Javier Solaz, y el concejal Ángel Silveria leyó un texto del escritor Antonio Funes, mientras sonaba el violín de Florencio Rozzi. Además, en la calle Francisco Fernández se ha colocado una piedra de la memoria (Stolpersteine) en homenaje al villaraltero, Miguel Orellana Madueño, que murió en un campo de concentración nazi.