La joven de nacionalidad India, Hemali, que falleció hace veinte días en Doña Mencía, a consecuencia de un trombo que le sobrevino días después de sufrir un accidente en un patinete eléctrico, sigue sin ser repatriada porque Sanidad de la India reclama un certificado de defunción emitido por un médico o un hospital, según han publicado en su perfil de Facebook los organizadores de la cuestación pública.

En dicha entrada indican que es incomprensible que después de 20 días se le niegue a la familia el derecho a dar sepultura a la joven y a recibirla en su tierra, por ese documento, "cuando se dispone del parte judicial basado en una autopsia".

El fallecimiento de la joven causó una auténtica conmoción en la localidad menciana, a donde la joven y su pareja habían llegado hace algo más de un año para montar un negocio de kebab que por culpa de la pandemia apenas habían podido poner en marcha. Con la relajación de las medidas, el negocio inició su actividad y la joven, de 24 años, empezó a repartir a domicilio los pedidos, con tan mala suerte que sufrió un accidente con el patinete eléctrico que la tuvo inmovilizada un tiempo. Cuando se recuperó y se incorporó a su trabajo sufrió un trombo que acabó con su vida.

Esta desgraciada circunstancia y la falta de recursos y familiares de la joven pareja hizo que el pueblo de Doña Mencía se movilizara y recaudara en solo tres días el dinero necesario para trasladar el cadáver hasta su país. Eso ocurría hace ya 20 días y todavía, por la reclamación del citado documento por la sanidad india, sigue sin hacerse realidad.