El Ayuntamiento de Cabra ha presentado el proyecto de reforma de la red de abastecimiento de agua del barrio de la Virgen de la Serra, que tendrá un coste de 316.335 euros, según explicó el alcalde, Fernando Priego. De este modo el grave problema que esta zona  viene padeciendo desde hace algunos años como consecuencia de la falta de caudal y de presión de agua que llega a sus domicilios, se verá resuelto a lo largo de los próximos meses. Las obras se iniciarán el próximo 17 del presente mes de mayo.

Priego explicó que con ellas se solventará una situación provocada por la cota de altitud en la que se encuentra y que el actual depósito de almacenamiento de agua no es capaz de suministrar con el caudal y la presión suficiente.

El alcalde, junto al delegado municipal de Urbanismo, Alfonso Vergillos, daba a conocer en el Centro Municipal Integrado, los detalles de este proyecto a los responsables de la asociación de vecinos San Francisco. La inversión a realizar y que se cifra en 316.335 euros va a estar financiada por la Diputación, a través del plan plurianual anterior, el correspondiente al periodo 2015-2019 «y que por diferentes circunstancias se ha demorado, tanto en su redacción como en su licitación por parte de la institución provincial», apuntaba el primer edil.

Se trata de una cuantía que, al no ser finalista y no estar destinada a un proyecto en concreto, hizo como, aseveraba Priego, «que el equipo de gobierno municipal, el que presidí en el año 2015, decidiese que ese dinero se destinase a este proyecto, porque entendíamos que era una necesidad de la barriada», completando las inversiones públicas que anualmente se acometen en el mismo y permitiendo en este caso, la construcción de una nueva estación de bombeo junto a los actuales depósitos municipales con un nuevo grupo de presión y la implantación de una serie de nuevos ramales de conducción, entre otra serie de elementos.

Las obras afectarán a una veintena de calles, avenidas y plazas de este barrio, el núcleo poblacional más importante del municipio, al residir en él más de 7.000 personas, un tercio de su población de la localidad.

El plazo de ejecución previsto para la realización de estos trabajos «de auténtica ingeniería»m como apuntaba Vergillos, es de 10 meses.