El fin de semana se ha saldado en Lucena con una nueva oleada de vandalismo, que en este caso se ha cebado con el robo de tres establecimiento de hostelería y ocio de la localidad, así como con varios vehículos que han aparecido destrozados. En el primero de los robos, los ladrones rompieron a primera hora de la mañana de ayer una de las puertas del bar y restaurante Cerro Gordo, ubicado en la calle Zaragoza del parque empresarial Príncipe Felipe. Al parecer, el robo se cometió en torno a las 7,15 horas de la mañana, después de que los ladrones rompieran un doble acristalamiento de seguridad que protege las puertas de esta establecimiento.

Para ello, según las fuentes consultadas, los delincuentes pudieron utilizar grandes mazos, aunque no se descarta como probabilidad que además hayan empleado algún explosivo que de hecho reventara materialmente la puerta de entrada al establecimiento. Los cristales de la fachada del edificio quedaron hechos añicos. Este tipo de explosivos es el que últimamente se viene empleando en otras zonas de la geografía española para cometer estos delitos y tiene la particularidad de dejar un fortísimo olor a combustible, según indicaron esas mismas fuentes. Sin embargo, la noche de vandalismo en Lucena no se quedó ahí. Después de reventar la puerta, los ladrones entraron al local del que se llevaron una máquina de tabaco, así como varias cajas de bebidas alcohólicas, un ordenador y una pequeña cantidad de dinero que había en la caja registradora, que se encontraba abierta.

Las cámaras de seguridad de que dispone este local pudieron registrar la entrada y salida de los ladrones que iban cubiertos por unas capucha que les cubrían el rostro y unos guantes, como puede apreciarse en la fotografía. Los delincuentes, que dejaron algunos pequeños rastros de sangre, cometieron el robo en un par de minutos y huyeron al parecer en un vehículo de la marca Ford, que había sido robado anteriormente. En las inmediaciones del bar, dejaron una pieza del coche, que protege la zona donde habitualmente realizan los denominados puentes a los vehículos robados. A los pocos minutos del robo se desplazaron hasta el parque empresarial agentes de la Policía Local, el Cuerpo Nacional de Policía y agentes de la Policía Científica.

Además, otros dos locales lucentinos han sufrido robos en las últimas horas. En concreto se trata del establecimiento de Macdonalds del polígono de los Polvillares y del bar Manolo, situado en la calle del Cristo Marroquí, en la zona de Campo de Aras.

La ola de vandalismo en Lucena también afectó al parque móvil. Además del robo en estos tres stablecimientos hosteleros, amanecieron cuatro vehículos completamente destrozados en el aparcamiento de la Huerta del Carmen. Se desconoce quién o quiénes podrían estar detrás de la autoría de estos hechos vandálicos y si están conectados o no con los robos de los bares ocurridos durante la jornada y la madrugada de ayer.

MUERE EL ANCIANO / Por otro lado, también se produjo ayer una fatal coincidencia ya que se da la circunstancia de que ha fallecido el anciano que días pasados fue asaltado en su casa de la calle La Calzada de Lucena, donde fue torturado salvajemente apagándole colillas en cara y pecho. La víctima presentó después del ataque numerosos cortes de arma blanca. Los delincuentes lograron llevarse del domicilio del anciano una cantidad en metálico de unos 1.500 euros, ue el hombre había sacado del banco el día anterior.