La actividad principal de Agroenergética de Baena es la generación de energía eléctrica con biomasa procedente de los residuos concentrados del olivar que se originan en las almazaras, con una potencia de 25 MW. El combustible utilizado por esta planta es el orujo y el alperujo, un residuo procedente de la obtención del aceite de oliva, cuya combustión se caracteriza por los bajos niveles de emisión de dióxido de azufre que se alcanzan frente a los obtenidos cuando se opera con combustibles fósiles tradicionales. Por este motivo, los principales contaminantes que se emiten durante el proceso de combustión en las centrales térmicas de biomasa sólida son las partículas y, en menor medida, los óxidos de nitrógeno y dióxido de azufre.