El polígono de Pedroches comenzó a construirse en el año 1994. Entonces, Antonio Bretones, que contaba con unos cincuenta mil metros cuadrados de terreno en esta zona, decidió urbanizar y crear un polígono industrial privilegiado por su ubicación muy cercano a la ciudad.

Tratarse de una superficie pequeña, con poco más de cien mil metros cuadrados, posibilitó que en muy poco tiempo, las parcelas se fuesen ocupando hasta agotar los espacios disponibles en la zona. Su fundador, Antonio Bretones, asegura que "fue precisamente por la necesidad que tenía de trasladar la empresa a estos terrenos por los que comenzamos a desarrollar el polígono que sería el más urbano de cuantos existen en la ciudad y que no nos quepa duda que el día que desaparezca el viaducto de Asland, estaremos ubicados dentro de Córdoba".

Para Bretones, no haber conseguido esa integración en la ciudad ha sido por una mala planificación en las obras del AVE, ya que "es incomprensible que las vías del AVE no pasasen por aquí por debajo de tierra y obligase a la construcción de esa joroba únicamente para que pase el tren, cuando lo lógico es que lo mismo que a continuación entra bajo tierra y atraviesa el polígono de Chinales, lo hubiese hecho antes y evitado el viaducto y sus numerosos inconvenientes".

Para Antonio Bretones el problema de los accesos siguen siendo un lastre para las empresas ubicadas en el polígono, ya que "es tal el tráfico que cada día accede a la ciudad por esta entrega que estamos hartos de tener que soportar atascos de tráfico en horas punta, ya que la única salida a vía rápida con la que contamos es precisamente la ronda que enlaza la autovía con la carretera de Badajoz y como vemos hay horas en las que existen dificultades para salir y habría que darle una solución que podría ser con la desaparición del viaducto de Asland que mejoraría el tránsito".