Sorprendía a algunos de los que estaban disfrutando de las fiestas de Doña Mencía en la caseta municipal la escasa aceptación que ésta tiene para la gente más joven. Se trata de una tendencia normal y corriente que los jóvenes prefieran su caseta con música disco, a la diversión en la tradicional caseta con música de orquesta. Por ello, en aquellos pueblos donde también existe una caseta joven, la municipal lo paga con la ausencia de éstos.

Independientemente de esta circunstancia, hay que destacar el ambiente que se vive en la caseta municipal con un público entregado a la diversión y dispuesto en todo momento a colaborar con las orquestas a la hora de realizar todo aquello que les pidan. La orquesta Passión invita a confeccionar una macedonia de frutas a la que el público no duda en apuntarse y, a base de movimientos de su cuerpo, ir añadiendo las distintas frutas que, una vez recibida la correspondiente dosis de azúcar, conformarán la macedonia final.

Antes, los pasodobles y los distintos ritmos que interpretan las orquestas Passión , Las mil y una noches y Los Duques hacen que las sillas se queden vacías y las parejas llenen la pista de baile disfrutando de la programación musical, elaborada por el Ayuntamiento para que sus vecinos disfruten con las fiestas de la localidad.

El entorno de la caseta vive las fiestas con gran intensidad. La calle que baja hacia el llano donde se ubican los cacharritos para los más pequeños va siempre muy concurrida. Los tenderetes y las terrazas de los bares reciben a muchos paseantes que observan algún que otro recuerdo para guardar de la fiesta. La variedad de productos hace que a veces sea difícil la elección de alguno de ellos, ya que todos resultan atractivos, especialmente en el apartado precio, lo que incita un poco más a su venta.

El recorrido de los padres con los pequeños por la zona de atracciones se hace interminable porque los niños quieren probar todos los cacharritos instalados sin intención de dejar alguno para otro día. Después, un chocolate y unos churros se agradecen antes de meterse en la caseta donde bailar hasta el final de la noche.