28M, un año de la victoria absoluta de Bellido en Córdoba

José María Bellido acaba de cumplir 20 años de trabajo en el Ayuntamiento de Córdoba (la mitad de ellos en la trinchera de la oposición), cinco como alcalde de la ciudad y uno como alcalde con mayoría absoluta. El 28 de mayo de 2023, hace justo un año, el dirigente logró dos hitos para el Partido Popular en Córdoba: revalidar el gobierno en Capitulares y lograrlo cosiendo una mayoría absoluta incontestable, inapelable, algo que se le escapó entre los dedos a su compañero de filas José Antonio Nieto en 2015 (Rafael Merino gobernó en dos ocasiones, 1995 y 1999, pero ninguna de ellas con la absoluta).

El alcalde revalidó la Alcaldía con 70.000 votos de respaldo tras un mandato en cogobierno con Cs

Aquella jornada del 28M, con resaca de Feria que no afectó a la abstención (casi 1,8 puntos menos que en los anteriores comicios), 70.000 cordobeses dieron su apoyo al regidor popular (el 46,2% del escrutinio) en una proporción similar a la de las otras mayorías históricas en la capital cordobesa: la de Julio Anguita, casi recién estrenada la democracia en 1983; y la de José Antonio Nieto, en 2011. Ambos regidores lograron el respaldo de más de 80.000 votantes en una ciudad que ha zigzagueado estos 45 años de democracia entre la derecha y la izquierda, y que había dado la campanada en 1979 al convertirse en la primera capital de provincias de España gobernada por el Partido Comunista.

El PP de Bellido arrasa con mayoría absoluta en Córdoba frente a una izquierda hundida

Tras un accidentado mandato con Ciudadanos

Bellido arrasó el 28M a pesar de que llegaba a la noche electoral después de sortear un accidentado mandato en coalición con Ciudadanos (2019-2023), que estuvo repleto de obstáculos. Sin embargo, atendiendo a las cifras, el electorado atribuyó todos esos errores al partido naranja, que perdió 5 de los 5 concejales que tenía, arrastrado, también, por la descomposición de la formación a nivel nacional. Los electores, de hecho, no solo absolvieron a los populares, sino que premiaron su gestión al frente del Ayuntamiento cordobés con 6 concejales más de los logrados en 2019. El alcalde supo, además, aprovechar la desintegración del partido de Albert Rivera incluyendo en su lista y en su equipo directivo a algunos de sus representantes en Córdoba (Isabel Albás o Antonio Álvarez), al mismo tiempo que hacía guiños a su electorado más escorado a la derecha rescatando a un exmiembro de Vox como Julián Urbano.

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Con 15 concejales

Tras la victoria electoral, Bellido recibía el respaldo suficiente para enfrentar cuatro años más de gobierno con un equipo de 15 concejales, que no necesitarían ni siquiera el apoyo simbólico de Vox como había terminado ocurriendo en su anterior mandato. En 2023, el partido de Paula Badanelli aspiraba a ser llave de gobierno, pero se quedó con la miel en los labios y en el banquillo de la oposición (ganó, eso sí, un concejal respecto a 2023 y tiene 3 en la actualidad).

La izquierda, muy tocada

Así, en un Pleno con 18 ediles adscritos a la derecha se sentaba una izquierda, si no hundida, al menos muy tocada, que apenas sumó 11 concejales la noche del 28M: 7 del PSOE de un dirigente que regresaba a Capitulares, Antonio Hurtado, que perdía uno de los 8 que obtuvo la exalcaldesa Isabel Ambrosio; y 4 de Hacemos Córdoba, la marca con la que acudió a las urnas la confluencia de las izquierdas y que no pudo retener los 5 ediles que IU y Podemos arañaron en 2019, quedándose con 4.

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Un juego de espejos

Como en un juego de espejos, José María Bellido ha ido siguiendo los pasos del presidente andaluz y líder del PP-A, Juanma Moreno, con el que se mimetiza por su perfil de político popular moderado. Ambos lograron desatarse con astucia de las ataduras que les infligían los socios de gobierno de su primer mandato para gobernar en solitario con el gozo que dan la mayorías absolutas. Ambos parecen tener por delante un horizonte político despejado que se concretará al ritmo que marquen los vaivenes de la política y sus propias ambiciones. En el caso del cordobés, de momento, ceñida al municipio a pesar de que en el último año no ha hecho nada más que sumar galones. En octubre, añadió a su currículum político la presidencia de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, a la que le auparon sus compañeros de formación tras la confirmación electoral de que Andalucía surfeaba, también en lo municipal, la ola de cambio impulsada por Juanma Moreno.

Su futuro político se concretará al ritmo que marquen los vaivenes de la política y su propia ambición 

Con 46 años, el alcalde de Córdoba llega a la madurez política con dos décadas de experiencia; las mismas que le quedan (y no estrictamente por ese orden) de aquí a la jubilación si los electores, su partido y él mismo quieren. Hoy, de momento, celebra un año de su mayoría absoluta.

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