La torrija de Córdoba, una dulce tentación

La Cuaresma y la Semana Santa, son junto a la Navidad, la época del año más dulce en cuanto a la elaboración y degustación de postres artesanales se refiere. Y en Córdoba hay una serie de delicias típicas de Semana Santa que no dejan indiferente ni al paladar más exquisito. Además de las tradicionales torrijas, hay otros muchos dulces que no faltan en las vitrinas de cualquier pastelería, como son los roscos fritos, roscos de viento, pestiños, gachas, leche frita, suspiros o magdalenas. 

Como ocurre en Navidad, que cada vez se adelanta más la realización de roscones de Reyes muy por delante de la fecha habitual, desde hace semanas en las confiterías ya se podían comprar torrijas y otros dulces, de forma que los cordobeses se vieron de lleno atrapados por los postres de Cuaresma cuando acababan de dejar de comer mantecados y turrón. 

Torrija con helado

En las pastelerías Roldán no faltan ni los pasos de Semana Santa para ambientar algunos de sus locales, como el que tienen en la avenida Gran Capitán. Allí, a diario se expenden incontables torrijas, tras numerosas horas de trabajo en su obrador para poder surtir así a todos sus establecimientos, una cifra de ventas que crece progresivamente conforme se acercan los días grandes de la Semana Santa.

Esta firma destaca que estos días lo que más se vende son las torrijas, aunque también se compran gachas, pestiños, arroz con leche, crema catalana o roscos fritos.

La torrija de Roldán destaca porque la crema que tiene en su interior está elaborada con los mismos ingredientes que dan forma a este dulce, lo que la hace especial. Además, hay cada vez más personas que optan por tomarse la torrija, acompañada de helado, cuando se sientan en alguna de las muchas pastelerías que el obrador tiene por toda la ciudad. 

Ingredientes especiales

En el caso de la panadería El Brillante, su director técnico, José Roldán, resalta que, si en estos días previos a la Semana Santa se elaboran cada día entre 400 y 500 torrijas, a partir del Domingo de Ramos los días festivos se alcanzarán entre las 700 y las 1.000.

Roldán precisa que la torrija de la panadería El Brillante se caracteriza por estar preparada con el pan de toda la vida con una leche que es el resultado de una infusión de leche, nata, canela, limón y un toque de vino dulce. La torrija es lo que más se vende en este obrador durante la Cuaresma y Semana Santa, aunque también el director técnico de la panadería El Brillante hace hincapié en que no deben dejar de probarse los pestiños, las gachas y la leche frita, así como las magdalenas, aunque estas últimas delicias se hacen todo el año. El uso de las mejores materias primas y de un aceite de calidad, renovado constantemente, son parte también del secreto del éxito de estos postres. 

Y si la pastelería San Rafael es conocida, incluso fuera de Córdoba, por su pastel cordobés y sus manoletes, no merecen menos mérito las suculentas torrijas que preparan en este obrador centenario, en cifras muy elevadas durante la Cuaresma y Semana Santa.

Pestiños rellenos

Otro ejemplo de buenos postres de Semana Santa son los que prepara la pastelería La Sultana. En los diferentes establecimientos que tienen se pueden comprar además de torrijas, roscos fritos, roscos de viento, pestiños normales y rellenos de crema o bolitas de coco.

También en los supermercados Deza Calidad la tentación de probar gachas, roscos de viento, pestiños y torrijas es posible porque en su obrador no paran de elaborar estos ricos dulces durante estos días. 

Opciones sin gluten y sin lactosa

Los cordobeses o visitantes que pasan estos días en Córdoba con intolerancia al gluten o la lactosa también tienen oportunidad de saborear torrijas. Empeñados en ello está el obrador Sensibles, ubicado en la calle isla Graciosa, que lleva dos años elaborando torrijas sin gluten y sin lactosa, con pan de harina sin gluten y sin lactosa, de la barra que habitualmente preparan y también de pan de brioche, precisan sus responsables. Estas torrijas se venden en envases de un solo uso, que contienen cada uno tres unidades. La Semana Santa, toda una dulce tentación (gastronómica).

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