Previsiones de la Red Española de Aerobiología y del hospital Reina Sofía

Las primeras alergias a pólenes llegan a Córdoba con la 'explosión' del ciprés

Las altas concentraciones de cupresáceas podrán alcanzar o superar los 1.000 granos por metro cúbico en una o dos semanas en la provincia

La lluvia que caiga en los próximos dos meses determinará cómo afrontan la primavera unos cien mil cordobeses sensibles al polen de olivo y gramíneas

Las mascarillas se empiezan a hacer más comunes durante la primavera.

Las mascarillas se empiezan a hacer más comunes durante la primavera. / A.J. GONZÁLEZ

M.J. Raya

M.J. Raya

En Córdoba hay unas 125.000 personas con alergia a algún tipo de polen, principalmente al del olivo y al de las gramíneas, aunque también hay quienes presentan sensibilidad al ciprés y las parietarias. En estos momentos, en Córdoba y gran parte de Andalucía se están registrando ya picos bastante altos del polen de ciprés, debido al adelanto de la polinización que está conllevando el clima de primavera que se está dando en febrero, a pesar de ser aún invierno. El ciprés es un árbol que se encuentra principalmente en la ciudad, señala Carmen Galán, coordinadora de la Red Española de Aerobiología, entidad ubicada en la Universidad de Córdoba

La jefa de la sección de Alergología de la Unidad de Inmunología y Alergología del hospital universitario Reina Sofía, Berta Ruiz, indica que es importante saber qué pólenes causan alergia en la provincia de Córdoba según la época del año, de forma que los pólenes que provocan más síntomas alérgicos en el invierno son el de ciprés, de diciembre a marzo, y el de parietaria de febrero a diciembre.

Síntomas durante todo el año

Luego ya en marzo irrumpe el polen del plátano de sombra, en abril las gramíneas, seguido del olivo (con pico en mayo), junto con el polen de salsola que está presente en el verano y en el otoño.  

Berta Ruiz, jefa de sección de Alergología del hospital Reina Sofía.

Berta Ruiz, jefa de sección de Alergología del hospital Reina Sofía. / CÓRDOBA

«Hay pacientes con alergia a la floración de varios de estos árboles y cultivos que al final pueden pasarse prácticamente todo el año presentando síntomas alérgicos, porque lo sean al ciprés, olivo y salsola, por ejemplo», señala la doctora Ruiz.

El polen de ciprés se va a disparar

En los últimos días, se están registrando picos de polen de ciprés de hasta 500 granos por metro cúbico en la provincia, expone Carmen Galán, teniendo en cuenta que desde los 100 granos los alérgicos ya aprecian síntomas. 

Y la previsión es que para la semana que viene y la siguiente puedan anotarse concentraciones de 1.000 o más granos de polen de ciprés por metro cúbico, a la vez que también está empezando a subir el nivel de polen de parietaria, que es una planta que se encuentra en paredes y muros abandonados, sobre todo de la parte más histórica de las ciudades. 

Galán precisa que, aunque también están ya en flor otros árboles como los chopos, fresno u olmos, su carga polínica no suele causar grandes problemas de alergia. 

Carmen Galán en su despacho del departamento de Botánica.

Carmen Galán en su despacho del departamento de Botánica. / A.J. GONZÁLEZ

Previsiones para la primavera

Berta Ruiz remarca que, aunque en Córdoba la cifra de alérgicos al polen de ciprés o parietaria no es muy elevado, no se podría descartar que estas personas sufran cada vez síntomas más acusados si continúan incrementándose las concentraciones de este polen durante la polinización, como al menos se ha comprobado en los últimos años.

En cuanto a la previsión de cómo se presentará la primavera para unos cien mil alérgicos en Córdoba al polen del olivo y de gramíneas, la coordinadora de la REA prefiere no aventurar con tanta antelación si habrá mucha carga polínica o no, pues todo dependerá de las lluvias que puedan caer en lo que queda de febrero, en marzo y abril. Sobre este tema, Carmen Galán expone que, en la primavera de 2023, debido a la grave sequía que aún continúa, la floración de olivo y gramíneas no fue muy abundante en Córdoba, aunque insiste que hace falta algo más de tiempo para conocer cómo podrían influir las lluvias que pudieran registrarse en la provincia esta primavera en la menor o mayor carga de polen de estos dos cultivos.

Tratamientos para las alergias

Berta Ruiz precisa que «si los síntomas respiratorios son molestos y afectan a la calidad de vida se debe acudir al médico de atención primaria para iniciar tratamiento con antihistáminicos, spray de corticoide nasal, colirio o inhaladores y si no hay control de síntomas y son recurrentes cada año esta persona debe ser derivada al especialista en Alergología. 

En la unidad de Alergología del Reina Sofía, que es referencia para toda la provincia, se le llevará a cabo un diagnóstico preciso, que incluye una prueba cutánea y también analítica para determinar las proteínas que causan alergia según el polen, y se valorará si necesita tratamiento específico con vacuna antialérgica (inmunoterapia), añade Ruiz

El resfriado da fiebre, la alergia no

El resfriado da fiebre, la alergia no

La jefa de sección de Alergología del hospital Reina Sofía, Berta Ruiz, aclara que, aunque puede haber síntomas que parezcan coincidir entre los habituales procesos respiratorios propios del invierno y las alergias, los pólenes causan unos efectos muy característicos. 

Ruiz precisa que una alergia no da fiebre, aunque un proceso vírico o un resfriado sí puede conllevar este síntoma, mientras que la alergia no genera el malestar ni dolor articular de un resfriado, pero sí puede originar cansancio al no descansar bien. Según esta especialista, los síntomas más habituales de la alergia son picor en los ojos, enrojecimiento, moqueo transparente claro (frente a la mucosidad espesa de un proceso respiratorio o resfriado), estornudos y síntomas asmáticos que empiezan con tos, presión en el pecho, dificultad para respirar o o silbidos, que son más graves. 

Por otra parte, entre los consejos más recomendados para evitar los síntomas alérgicos están la no realización de deporte al aire libre o excursiones al campo a primera o última hora del día, pues es cuando se concentra mayor cantidad de polen en el ambiente. 

Tampoco viene bien ventilar la casa a esas mismas horas, sino mejor en la franja central del día, al igual que es mejor evitar conducir con las ventanillas del coche abiertas o tender la ropa fuera, así como se aconseja utilizar filtros antipolen en el coche y limpiar bien el polen de las ventanas u otras superficies con un paño húmedo o aspirador. Igualmente resulta muy útil usar mascarilla FFP2 o gafas de sol que ajusten bien para impedir la entrada de polen en los ojos.

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