Asociaciones en defensa del español claman contra el despido del cocinero cordobés: "Es una barbaridad"

El caso del cocinero cordobés despedido del Ayuntamiento de Barcelona por no acreditar un nivel suficiente de catalán, destapado por este medio, ha provocado ya las primeras reacciones de asociaciones que defienden el uso compartido del español en Cataluña. «Es una barbaridad», «están locos» o un «ERE encubierto» son algunos de los calificativos que aplican los presidentes de los colectivos Hablamos Español y Convivencia Cívica Catalana.

Docenas de casos

Manuel Escribano, cocinero natural de Pedroche que llevaba 17 años en el Consistorio de la Ciudad Condal como interino, no es ni de lejos el único despedido. Poco a poco se van conociendo situaciones similares que ya suman varias docenas. Todos los expedientes de despido, según estas asociaciones, afectan a personas de edad media, en algunos casos con casi 30 años de servicio. 

Barcelona despide al cocinero cordobés del alcalde por no hablar catalán con un nivel medio certificado

El Ayuntamiento de Barcelona, aseguran los dos colectivos, ha ido comunicando los despidos de forma escalonada para no tener que hacer un expediente de regulación de empleo (ERE), lo que supondría indemnizaciones más elevadas y planes de jubilación. 

Hablamos Español

Gloria Lago, presidenta de Hablamos Español —que está llevando la demanda de un clarinetista sevillano—, ha indicado que en el Consistorio catalán «están locos. En el caso del cocinero el requisito de idioma es excesivo. Los han despedido sin tener en cuenta que es un despido colectivo, es un ERE puesto que son muchas personas de un ámbito similar. Y no hay por qué regalarles nada», de modo que invita a denunciar al Ayuntamiento cuanto antes. 

En su opinión, el independentismo catalán «quiere demostrar su poder y dar el mensaje de que para estar aquí y beneficiarse del lujo de vivir en Cataluña hay que pasar por el aro. Así se crean situaciones muy injustas».

Convivencia Cívica Catalana

Por su parte, el presidente de Convivencia Cívica Catalana, Ángel Escolano -abogado laboralista de profesión-, sostiene que nunca había visto un caso de conflicto laboral como éste, con al menos 30 afectados despedidos por los mismos motivos. La asociación tiene recurridas las bases del proceso de estabilización de interinos en Barcelona, cuyo juicio está visto para sentencia. Según Escolano, el Consistorio barcelonés ha querido despedir a los afectados antes de que se conozca la sentencia para que no puedan acogerse al dictamen del juez si resulta favorable a los demandantes. 

Además, para Escolano «todo esto es una barbaridad, porque los han echado de un día para otro. Hay muchas irregularidades». 

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