La periferia pide paso en Córdoba

Una preocupación común rodea a Córdoba: la integración de las barriadas periféricas, que mantienen una lucha eterna por conseguir que vivir alejado del núcleo urbano de la ciudad no suponga un perjuicio para los ciudadanos. Todas, a través de los consejos de distrito, que engloban a las asociaciones y entidades de la barriada, comparten una causa común. No es otra que conseguir una igualdad de servicios en comparación con el resto de distritos de la capital.

Es, básicamente, un concepto de «integración», explica Juan Andrés de Gracia, presidente del Consejo de Movimiento Ciudadano (CMC) de Córdoba.

Tres cuestiones resumen, prácticamente, la multitud de asuntos que reivindican desde la periferia cordobesa: movilidad, equipamientos y servicios básicos. Aunque un cuarto aspecto como el desarrollo económico --si bien algo más utópico- no deja de ser una área de relevancia para que las barriadas periféricas de Córdoba mantengan enraizada a su población o, incluso, crezcan. 

Actualmente, la capital cordobesa cuenta con seis barriadas de este tipo, con categoría de distrito administrativo, alrededor de todo el núcleo urbano. Son Villarrubia, El HiguerónSanta CruzAlcoleaTrassierra y Cerro Muriano. Sin embargo, más pronto que tarde, otra zona, en territorio de nadie, podría convertirse en la séptima. De hecho, es una de las principales líneas en las que se trabaja desde el vecindario y el CMC. El próximo año quizás sea el definitivo para que Carrera del Caballo --o Levante Este, si se prefiere-- pase a formar parte de la lista de barriadas de la periferia de Córdoba. Para ello, deberá pasar a ser un distrito administrativo y no solo municipal como ya consta. El objetivo es «intentar consolidarlo», señala Juan Andrés de Gracia.

Cada barriada tiene sus propias necesidades particulares y, en algunos casos, distintas al resto, ya sea por su situación geográfica, por los equipamientos con los que ya cuenta o por la diversidad poblacional de cada una de ellas.

Pero todas sí que comparten otras muchas necesidades, sobre todo en el área de la movilidad, aunque también en el despliegue de algunas infraestructuras. Sobre el primer aspecto, el Ayuntamiento asegura que ha mejorado las líneas periféricas, desde el punto de vista de las infraestructuras o creando «nuevas paradas que nos piden los vecinos cuando es técnicamente posible y existe una demanda verdadera». La mejoría es «progresiva». «Poco a poco vamos bajando estas frecuencias o cuanto menos reforzando a tiempo real cuando comprobamos que la demanda es demasiado alta», señalan desde el Consistorio. Y añaden que las barriadas «tienen frecuencias muy similares a las que tienen los barrios que cubren las líneas 10,11 y 13».

Más allá de esos aspectos, la periferia mantiene un sentimiento común de abandono por parte de la Administración y así lo expresan sus representantes. Creen que sus reivindicaciones, que se precisan a continuación, en muchos casos no son, ni tan siquiera, escuchadas. De hecho, algunos proyectos suman años y décadas de lucha vecinal. Cada barriada avanza a su ritmo, pero encuentra en la carencia de equipamientos o prestaciones una gran traba para su día a día. El fin de sus reivindicaciones, señalan, es conseguir la igualdad real con el resto de cordobeses. 

Villarrubia | La accesibilidad, esencial

Una lista de peticiones históricas pendientes

Resumir las demandas de Villarrubia resulta complicado. Además, del deterioro de las calles, de la falta de personal para el centro cívico y de la escasez de seguridad porque «solo hay un policía local», esta barriada tiene necesidades importantes, como un centro de salud que no se contempla, indica el presidente del consejo de distrito, Juan Miguel Caballero.

Muchas de esas peticiones son históricas, como la que tiene que ver con los pasos subterráneos. Para mejorar la accesibilidad, Caballero asegura que Urbanismo se comprometió a mejorar ese paso. Los trámites para realizar una pasarela elevada por parte de Fomento están en marcha, pero sigue pendiente. También apuntan a la necesidad imperiosa de que Urbanismo acometa el viaducto que una el polígono industrial con la N-431.

En cuanto al transporte, Villarrubia reclama un cercanías y un servicio de autobús que se ajusten a los horarios y las necesidades de sus vecinos. Las frecuencias, apuntan, son escasas, especialmente los fines de semana. 

De una instalación deportiva, con 150.000 euros comprometidos en el presupuesto municipal para su redacción, aún no tienen noticias. 

Cerro Muriano | Al amparo de Obejo

De servicios básicos a una vía verde esencial

Las reivindicaciones de Cerro Muriano «son siempre las mismas», dice Pedro Loaisa, el presidente del consejo de distrito. Se refiere a sustituir el alumbrado anticuado (se instalarán luces led), al transporte o a los servicios de limpieza y jardinería. En ese sentido, apunta a un escaso servicio de recogida de basura y de jardinería.

Más allá de esos aspectos esenciales, Loaisa exige que el tramo de la antigua N-432 que atraviesa la barriada se adecúe como calle, con una «acera en condiciones».

En cuanto al tema de las infraestructuras, Cerro Muriano suple con solvencia sus principales carencias gracias a sus convenios con Obejo, señala el presidente . Sobre el centro cívico, asegura que están «echándolo a andar», sumando diversas actividades. 

Más ambicioso quizás sea -aunque Loaisa considera que no debe suponer un gran esfuerzo económico-- la consecución de una vía verde que una la barriada con el núcleo urbano por la antigua vía de El Morchón. Casi utópico le parece pedir un proyecto para el entorno de la zona minera, que podría tener un fuerte atractivo para el visitante. No sería la primera vez que se aborda. 

Alcolea | A la espera de las obras

Proyectos en marcha y arreglos por hacer

Una de las principales demandas de Alcolea era un nuevo centro de salud, cuya construcción adjudicó la Junta de Andalucía a principios del año. Los vecinos aguardan para ver las obras finalizadas y el centro en funcionamiento. Las previsiones de la Junta apuntan a la primavera de 2024 como fecha clave para ver al consultorio en pleno rendimiento. En la misma situación se encuentra el puente de entrada a la urbanización El Sol, cuya obra comenzó en verano y tiene un plazo de ejecución de siete meses.

Pendiente queda el arreglo de la carretera de acceso al cementerio de la Fuensanta, hundido hace meses, así como la reparación de uno de los muros del campo de fútbol. 

Al igual que el resto de barriadas, Alcolea también cree conveniente la mejora de los servicios de transporte, tanto de cercanías como de autobús, con una mayor y más ajustada frecuencia de horarios para atender de la forma más óptima las demandas de los vecinos.

Como señala el presidente del Consejo del Movimiento Ciudadano, Juan Andrés de Gracia, también sería interesante abordar, desde un punto de vista cultural e histórico, la situación del puente de Alcolea, donde se vivió la batalla de 1868. 

Trassierra | El entorno natural

Una red de agua y el desarrollo de la sierra

Las principales preocupaciones de la barriada situada en plena Sierra de Córdoba se pueden resumir en dos temas: movilidad y medio ambiente. Si en esa última área, claro, se incluye el servicio del agua.

En primer lugar, Trassierra considera que un servicio de autobús diseñado acorde a las necesidades de la zona vendría a paliar los problemas de movilidad que tienen y a brindar una gran oportunidad a cordobeses y empresarios, ya que, recuerda el presidente del consejo de distrito, Juan Manuel Luque, «la Sierra es de todos los cordobeses». Por eso, reivindican un servicio que permita a los cordobeses disfrutar más del entorno natural e impulse el desarrollo económico de la barriada. Asimismo, creen oportuno que la línea que sube a Las Jaras entre en Siete Fincas, una de las urbanizaciones más pobladas. En otro orden de cosas, el agua preocupa, y mucho. Luque considera obligatorio que la Sierra cuente con una red potable de agua y, entre otras cosas, se resuelva la situación de agua de Las Jaras, a través de la gestión por parte de Emacsa. Es necesario, en su opinión, tanto para dar servicio a los residentes como para hacer frente a los posibles problemas. 

El Higuerón | Larga lista de reclamos

Unas infraestructuras que son «ineludibles»

Entre otras muchas dotaciones, el consejo de distrito de El Higuerón considera ineludible la construcción de un instituto y un centro de día y mayores, así como la habilitación de un recinto ferial y una zona de eventos.

El presidente del consejo de distrito, Juan Carlos Montero, enumera, además, una serie de requerimientos, que van desde el arreglo del centro cívico de la barriada y el ambulatorio hasta la construcción de un polideportivo. También pide más equipamientos en la barriada de la Golondrina, la urbanización de la calle de acceso al Aguilarejo desde la avenida principal, el asfaltado del camino de acceso antiguo, soluciones para el camino viejo de Almodóvar, la unión a modo de circunvalación de la avenida principal y el camino antiguo, la canalización de arroyos para solucionar las inundaciones, la cesión de las carreteras CH2 y CH3 al Ayuntamiento para su mantenimiento o el arreglo de la vereda de la Canchuela.

Asimismo, considera necesaria una guardería pública y un ecoparque, sobre el que informaron a Sadeco. Exigen, también, mayor seguridad, mediante una sede permanente de la Policía Local. 

Santa cruz | El transporte, clave

Sin servicio de Aucorsa y sin pistas deportivas

De las barriadas periféricas de Córdoba, Santa Cruz es, en estos momentos, la única que carece de consejo de distrito conformado. Así lo explica Juan Andrés de Gracia, presidente del Consejo de Movimiento Ciudadano, quien apunta a la falta de infraestructuras como uno de sus principales problemas.

No es nueva la reivindicación de instalaciones deportivas para la barriada, que tan solo cuenta con la pista del CEIP Elena Luque, abierto únicamente por las tardes para que puedan usarla los menores.

Otro de los problemas es la movilidad. Esta barriada no disfruta del servicio de Aucorsa, aunque cuenta con uno prestado por la empresa Carrera y gestionado por el Consorcio de Transportes, con seis viajes de ida y seis de vuelta entre semana, tres viajes el sábado y cuatro los domingos. El servicio, según el Ayuntamiento, supone una parada más en la ruta de Carrera. Sin embargo, para Aucorsa equivaldría a 739.688 euros. Desde el Consistorio señalan también que el precio del billete «es el mismo que el de los autobuses urbanos» y que para que Aucorsa prestara el servicio habría que «pedir la municipalización de la vía, e indemnizar a la empresa Carrera por quitarles la concesión». 

Suscríbete para seguir leyendo