Salud

Innovación y experiencia al servicio del paciente oncológico

El Hospital San Juan de Dios se sitúa a la vanguardia de la sanidad privada cordobesa en el abordaje integral del cáncer gracias a un circuito único y completo que incluye técnicas innovadoras y alta tecnología

Parte del equipo médico que compone el Comité de Tumores del Hospital San Juan de Dios en Córdoba.

Parte del equipo médico que compone el Comité de Tumores del Hospital San Juan de Dios en Córdoba. / Córdoba

Diario CÓRDOBA

Como en el resto de especialidades, poner el foco en el paciente y no en la enfermedad ha sido el principal objetivo del Hospital San Juan de Dios de Córdoba desde que comenzó a abordar la patología oncológica hace 20 años. La evolución en este tiempo ha ido pareja a la demanda de una enfermedad que a la vez que incrementaba su incidencia, hacía lo mismo con unos tratamientos más efectivos que conllevaban que esta patología comience a abordarse en muchos casos como algo crónico.

Actualmente, el Hospital San Juan de Dios es el único que cuenta con un servicio de oncología radioterápica.

Con todo ello, el centro de la Orden Hospitalaria se sitúa hoy día a la vanguardia de la sanidad privada cordobesa en el abordaje integral del cáncer gracias a un circuito único y completo que incluye técnicas innovadoras y alta tecnología, desde el diagnóstico al tratamiento, combinado todo ello con una atención personalizada y multidisciplinar y procesos de rápida resolución para garantizar una detección precoz.

“Recientemente hemos inaugurado una línea de trabajo en el hospital para implementar estos modelos de identificación temprana, que ya están establecidos plenamente en procesos como la carcinomatosis peritoneal  y están comenzándose a desarrollar en otros frecuentes como el de mama o los urológicos”, destaca el director gerente del Hospital San Juan de Dios de Córdoba, Horacio Pijuán, quien resalta la apuesta del centro por esta especialidad, una de las más demandadas en las consultas externas según los datos de la Memoria de 2022, junto a ginecología, traumatología y cirugía general.

La detección precoz en cánceres como el abdominal, mama o próstata incrementa las posibilidades de poder realizar un abordaje preciso y efectivo en el menor tiempo posible. En este sentido, el Hospital San Juan de Dios lleva una década de experiencia en el tratamiento quirúrgico radical de la carcinomatosis peritoneal, siendo referente en la medicina privada andaluza en este campo.

De ahí, apunta Enrique Cantillo, director médico del centro, la importancia de instaurar este tipo de procesos “que pone en valor la capacidad de nuestros profesionales para trabajar en equipo, de manera coordinada y con un objetivo común: la detección precoz de las enfermedades y la recuperación del paciente con los tratamientos más avanzados y desde una perspectiva integral y multidisciplinar, garantizando así resultados óptimos”.

Único centro con servicio de radioterapia

Actualmente, el Hospital San Juan de Dios es el único que cuenta con un servicio de oncología radioterápica, dotado de un acelerador lineal de electrones, en el que se aplican novedosos tratamientos con el objetivo de reducir tanto el número de sesiones que reciben los pacientes, como los efectos secundarios de las mismas.

Tal es el caso de la radioterapia estereotáctica corporal (SBRT) que se aplica para tratar el cáncer de próstata de manera coordinada entre el servicio de Urología del Hospital, debidamente acreditado para ello, y los oncólogos radioterápicos del centro. Este método permite administrar dosis más potentes de radiación en la diana del tumor, gracias a sistemas de imagen tridimensional y técnicas de localización que hacen que se dañe menos tejido sano. Esto posibilita, mediante la inserción de un gel espaciador rectal, reducir la duración del tratamiento de una treintena de sesiones, a tan solo cinco, en casos seleccionados de pacientes considerados de bajo riesgo o riesgo intermedio.

Una técnico de la unidad de medicina nuclear prepara las instalaciones para atender a un paciente.

Una técnico de la unidad de medicina nuclear prepara las instalaciones para atender a un paciente. / Córdoba

Precisamente, la selección de estos pacientes es posible, como destaca Enrique Cantillo, gracias a las reuniones semanales que mantiene el comité de tumores, “en la que se evalúan diferentes casos de pacientes, de manera individualizada, para darles un respuesta específica, a su medida”. Este equipo multidisciplinar está formado por profesionales de primer nivel en las diferentes unidades asistenciales como oncología médica, aparato digestivo, anatomía patológica, radioterapia, medicina nuclear, dermatología, diagnóstico por imagen de alta resolución, urología, cirugía general, ginecología, medicina interna, otorrinolaringología, cirugía maxilofacial y unidad de periteroctomías.

La Unidad de Medicina Nuclear

Con la puesta en marcha de una avanzada Unidad de Medicina Nuclear a inicios de 2023, el centro de la Orden Hospitalaria busca consolidarse como referente en el ámbito de la oncología, no solo en la provincia de Córdoba, sino también a nivel andaluz, por lo que supone de implantación de procesos integrales oncológicos de rápida resolución.

Esta unidad incorpora avanzada tecnología, donde destaca un equipo de PET-TAC y una Gammamacámara que permiten el diagnóstico y tratamiento de los tumores de manera más precisa y localizada. Tal es el caso de la aplicación, entre otras técnicas, de la de teragnosis, una combinación de terapia y diagnóstico, que ha demostrado una elevada eficacia sobre todo en el abordaje de tumores neuroendocrinos o de próstata avanzados, o del ganglio centinela, fundamental para aquellas lesiones tumorales de mama, piel o cabeza para que sean diagnosticadas y tratadas de manera multidisciplinar. 

El centro cuenta, como valor añadido, con un modelo asistencial integral y humanizado que abarca al paciente y su familia.

En este sentido, la atención al cáncer de mama es otra de las más consolidadas en el centro de la Orden Hospitalaria, con profesionales de referencia. Solo en octubre se administraron 173 sesiones de tratamiento de oncología médica (quimioterapia) y en 2022 se realizaron más de un centenar de intervenciones quirúrgicas. Todo ello respaldado con un programa de Humanización en la asistencia, que ha permitido el desarrollo de actividades de yoga o mindfullness para cuidar también el bienestar mental de las pacientes, entre otras cuestiones. 

El hospital cuenta, además, con una unidad específica de imagen de la mujer que destaca por disponer de un protocolo de acto único que permite realizar todas las exploraciones en un mismo día, incluso cuando es necesario realizar estudios complementarios a la mamografía con tomosíntesis que se realiza en el centro y que es la forma más avanzada de este tipo de prueba. 

Esta unidad se integra en el servicio de diagnóstico por imagen de alta resolución que acaba de incorporar equipos de última generación, que incluyen herramientas como la inteligencia artificial que aportan al paciente una valoración más completa y precisa, así como una mayor comodidad y seguridad durante las pruebas, reducción tanto el tiempo de exposición, como la dosis de radiación en las mismas.

La humanización como valor añadido

Además de la capacitación profesional, técnica y tecnológica, el centro de la Orden Hospitalaria cuenta, como valor añadido, con un modelo asistencial integral y humanizado que abarca al paciente y su familia, con unidades específicas de acompañamiento y programas de humanización para prestar una asistencia cálida, a la altura de la dificultad emocional que en la mayoría de ocasiones entraña el cáncer, con el objetivo de que el paciente y sus familiares se sientan apoyados en todo momento.

Se trata, como concluye el director gerente del hospital, de que el paciente oncológico encuentre todo el apoyo que necesita para afrontar una enfermedad, con tantas aristas como la oncológica: “Para ello existe también un convenio con la Asociación Española Contra el Cáncercon el que los pacientes pueden tener acceso a sus programas, que se suma a nuestro modo de atender, cuidar y acompañar al paciente, que se hace aún más necesario en procesos como el oncológico, que afectan de manera global al día a día de la persona y su entorno más cercano”.