CONFEDERACIÓN HIDROGRÁFICA DEL GUADALQUIVIR

La CHG descarta el vertido y achaca la mancha en el río a su paso por Córdoba a la presencia de algas

La situación se produce por un fenómeno natural fruto de las altas temperaturas y el bajo caudal del Guadalquivir

Imagen de la mancha localizada en el río Guadalquivir.

Imagen de la mancha localizada en el río Guadalquivir. / CÓRDOBA

Araceli R. Arjona

Araceli R. Arjona

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CGH) ha informado este viernes de que sus técnicos han concluido que el origen de la mancha localizada en el río Guadalquivir a su paso por Córdoba no es un vertido sino a una concentración de algas. Según fuentes de la Confederación, a principios de semana recibieron una alerta similar y tras los análisis pertinentes confirmaron la presencia de algas, fruto de un fenómeno natural causado por el calor y porque el caudal del río es muy bajo.

Tras esta incidencia, los técnicos de la Confederación han vuelto a recoger muestras de agua este viernes para investigar una nueva mancha detectada, confirmando de nuevo que se trata de una concentración de algas.

La Empresa Municipal de Aguas de Córdoba (Emacsa)alertaba este jueves de la presencia de un "vertido extraño" del que no se tomaron muestras al provenir del exterior del término municipal de la ciudad, de la parte alta del río, y por lo tanto, quedaba fuera de sus competencias.

Antes que la CHG, la Delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ya había descartado el vertido, señalando que "no se apreciaba presencia de ningún fluido". Según los técnicos de la administración andaluza, "se trata de una proliferación de algas debida al bajo caudal del río, las altas temperaturas y el exceso de nutrientes". En cualquier caso, las algas no son tóxicas para la fauna de este entorno natural.

Antecedentes en la presencia de algas

No es la primera vez que se detectan algas en el río Guadalquivir a su paso por la ciudad. En mayo de 2020, una concentración de algas de origen natural visibles desde el casco urbano se extendió por el cauce alarmando a la ciudadanía, que lo asoció a un vertido. En su día, se explicó que ese fenómeno se debía a un proceso natural causado por la misma situación que ahora, la falta de precipitaciones y el aumento de las temperaturas.