La Guardia Civil de Córdoba investiga al conductor de un camión de 40 toneladas que circulaba de forma negligente quintuplicando la tasa máxima de alcohol permitida. Según informa la Benemérita, el vehículo circulaba por la autovía A-4 y fue interceptado a la altura del área de servicio de La Mezquita. El conductor había parado a comer en Manzanares, dónde consumió las bebidas alcohólicas.

Según explica la Guardia Civil en una nota de prensa, sobre las 16.30 horas del pasado domingo, 21 de agosto, el teléfono de emergencias 112 recibió llamada telefónica en la que un usuario informaba de la conducción anómala de un camión de gran tonelaje. Al parecer, circulaba saliéndose constantemente de su carril. Inmediatamente la central operativa del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil pasó el comunicado y movilizó a las patrullas que estaban próximas al punto del aviso, sobre el kilómetro 390 de la autovía A-4 sentido Sevilla.

Interceptado en el área de servicio de La Mezquita

Una de las patrullas movilizadas localizó al camión en cuestión y circuló tras de él, observando la infracción. Finalmente le dieron el alto en el área de servicio de La Mezquita, apreciando que el conductor presentaba claros síntomas de encontrarse bajo los efectos del alcohol. Le realizaron por tanto la prueba de alcoholemia, que arrojó un resultado de 0,89 y 0,84 mg/l en las dos pruebas preceptivas. Estas tasas suponen la comisión de un delito contra la seguridad vial. Cabe recordar que la tasa máxima de alcoholemia permitida para un conductor profesional es de 0,15 mg/l.

El conductor de este camión de 40 toneladas de masa máxima autorizada, fue investigado por la presunta comisión de un delito contra la seguridad vial, siendo citado para la celebración de juicio rápido en la mañana del día siguiente, lunes 22, en el Juzgado de Instrucción de Guardia de Córdoba.

Tras finalizar las diligencias el vehículo (que trasportaba mercancía desde Valencia hasta Dos Hermanas), quedó inmovilizado en la misma área de servicio dónde tuvieron lugar las actuaciones. A requerimiento del conductor se comprobó su tasa de alcoholemia en un par de ocasiones durante la noche, pero no fue hasta las 6.30 horas de la mañana del lunes cuando el conductor finalmente arrojó una tasa inferior a 0,15 mg/l, lo que le permitió continuar viaje. 

El conductor se enfrenta a una pena de prisión de tres a seis meses

Precisamente, la semana anterior, del 8 al 15 de agosto, la Dirección General de Tráfico y la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil realizaron una campaña especial de intensificación de la vigilancia y concienciación sobre el riesgo que supone el consumo de alcohol y drogas por los conductores. Sobre ello, resaltar que según la última memoria correspondiente a 2021 del Instituto Nacional de Toxicología, en el 49% de los fallecidos en carretera se detectó la presencia de alcohol, drogas o psicofármacos.

Dicho conductor, de 60 años de edad, podría enfrentarse a pena de prisión de tres a seis meses o de multa de seis a doce meses o de trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.