Córdoba es una ciudad perfecta para aprender a pilotar un avión. Y lo es por dos razones: su clima y un aeropuerto sin tráfico. Por eso, la escuela de pilotos danesa Greybird ha asentado su sede española en Córdoba, donde, además, lleva a cabo una ronda informativa para todo aquel que sueñe con volar. El CEO de la empresa, Søren Møller, y la base manager, Lidia Roset, han sido los encargados de mostrar las claves principales del curso para pilotos de Greybird.

¿Qué hace falta para ser piloto? Los estudios básicos, es decir, la Secundaria y un buen nivel de inglés (el curso es bilingüe), además de desembolsar 80.000 euros, que es lo que cuestan los dos años de formación, que incluyen tanto práctica como teoría. Greybird ya ha alquilado parte del aeropuerto de Córdoba para establecer allí oficinas, aulas y espacio de prácticas. Y no solo será usado por quienes estudien en Córdoba, ya que a mediados de octubre se desplazarán hasta aquí varios alumnos que han estudiado en el norte de Europa, donde la climatología, a estas alturas del año, hace muy complicado poder aprender a coger un avión.

El perfil de estudiantes que han pasado por Greybird es muy concreto: jóvenes varones de entre 22 y 27 años, aunque como cuentan sus responsables, cada vez hay más mujeres.

Patricia Blanco es una de ellas. Tiene 24 años y es de Córdoba, y como ella misma reconoce, ser piloto es su vocación. Explica que se ha apuntado al curso de Greybird para explorar la presencialidad que ofrece, ya que ella ha estudiado ya parte de la formación de forma telemática, con otra empresa. Además, ha trabajado como azafata de vuelo, aunque su sueño es el de pilotar una nave. Si se decantó primero por esta profesión fue por el dinero, para poder ahorrar y costearse el curso. Ya ha hecho prácticas con avioneta en el aeropuerto de Córdoba.

Patricia Blanco. MANUEL MURILLO

La vocación mueve también a Alejandro Aguado, de 23 años y también cordobés. Él estudia Ingeniería Industrial, pero desde pequeño ha querido ser piloto. Si se decantó por una carrera universitaria de este tipo es para tener más posibilidades de encontrar trabajo como piloto (la empleabilidad es de más de un 95% en la profesión). 

Alejandro Aguado. MANUEL MURILLO

Greybird será la segunda escuela de pilotos que funcione en el aeropuerto de Córdoba tras Patria. Esta última academia procede de Finlandia y ya ha formado en el aeródromo cordobés a varios pilotos. Según explicó Patria en su día, tras la graduación de 12 alumnos, la intención es ampliar sus instalaciones en el aeropuerto.

En Greybird, según explican sus responsables, no existe cupo para presentarse, aunque puede ocurrir que haya que dividir a los alumnos en grupos o que, ante una alta demanda, algunos tengan que esperar al año siguiente. Esta escuela pide, además de los requisitos ya nombrados, pasar un examen básico con conceptos lingüísticos y de matemáticas, además de un test de personalidad y una entrevista personal.