Los vecinos de uno de los nuevos barrios de la ciudad, el de Turruñuelos, tienen serias dificultades para cruzar andando hacia el Parque Figueroa y la zona de Cañito Bazán. Son recorridos que, además, muchos de estos vecinos tienen que hacer a diario y con niños para ir, por ejemplo, a colegios como el Tirso de Molina o el Turruñuelos. El problema es la densidad del tráfico que pasa por la ronda Oeste y también la velocidad a la que van los vehículos. «La glorieta del Hipercor es muy peligrosa de cruzar, porque, aunque tiene semáforos, muchas veces se quedan en ámbar y es imposible. Yo tengo que pasar a diario con mi hijo de 7 años y me da pánico», reconoce Carmen Rodríguez, una de las vecinas que se está moviendo para exigir una solución a las administraciones. El problema es que otras personas cruzan, porque les pilla mejor, por la glorieta que hay junto a la gasolinera, que ni tiene semáforos ni pasos de cebra y es aún más peligrosa.

El grupo municipal socialista se hizo eco de esta queja vecinal en el último pleno y se va a retomar la recogida de firmas, que se paralizó con la pandemia, para reivindicar la colocación de un paso elevado que les permita cruzar con más seguridad en ambos sentidos, ya que también son muchos los que tienen el problema a la inversa y a quienes les cuesta trabajo llegar hasta el centro comercial o salir hacia la recién estrenada vía verde. «La única opción que nos queda es bajar hasta el paso de Miralbaida, pero lógicamente eso está muy lejos de nuestras casas». Para estos vecinos, cualquier solución que se busque sería buena también para los negocios (la gasolinera y el centro comercial).

El del paso elevado es solo una de las reivindicaciones que tienen los habitantes de una barriada con tan pocos años de vida, ya que, además, no están organizados en ninguna asociación, y que han visto cómo han ido creciendo de manera exponencial. «Es un barrio muy nuevo. No hay servicios ninguno. Faltan pistas deportivas y a veces servicios básicos de limpieza: hasta hemos quitado los vecinos las hierbas para poder pasar a la cochera», comenta. Además, denuncian que siguen teniendo un parque sin luz aún, «donde se hacen botellones y carreras de coches y motos por la zona. Queremos más seguridad y que esto no sea barrio solo para dormir. No puede ser que estemos abandonaos, cobrándonos un IBI de zona de lujo sin servicio ninguno», concluye Carmen Rodríguez.