La restauración de la Puerta del Puente está cada vez más cerca. La Gerencia de Urbanismo acaba de adjudicar las obras que frenarán el deterioro de este monumento ubicado en el eje monumental y que fue restaurado por la Junta en la primera década de este milenio. El organismo municipal ha encargado los trabajos a Construcciones Antroju, que los llevará a cabo por 116.159 euros y en un plazo de medio año. Se trata de una obra muy demandada, ya que distintos colectivos y grupos municipales han exigido que se dé un arreglo a este singular monumento. Ya solo queda el plan de seguridad y salud y la formalización del contrato. Si no hay retrasos, la Puerta del Puente estará en obras este verano.

Siete meses han transcurrido desde que Urbanismo sacara a concurso las obras, que licitó por casi 120.000 euros, por lo que se ha producido una rebaja del 3% en la adjudicación. Los trabajos consistirán en consolidar la piedra mediante el sistema de carbonatogénesis bacteriana. Se trata de un gel con unas bacterias que generan carbonato cálcico, que fortalece la piedra caliza. Además, en la limpieza se utilizarán técnicas manuales, el láser, y en la consolidación, nanopartículas de cal en las zonas interiores y en las distintas caras, excepto en la sur, en la que se aplicará la carbonatación bacteriana también. Los trabajos incluyen sanear las llagas y eliminar sales.

En la Puerta del Puente se ha producido un debilitamiento de los morteros aplicados achacable a la humedad, la temperatura, las sales, las características propias de la piedra calcarenita y a la acción humana, según consta en el proyecto, que alude a la "deficiente ventilación de la estructura muraria y, quizás, la mala aplicación de los morteros".

La Puerta del Puente fue restaurada dentro del programa de actuación del eje monumental que llevó a cabo la Junta y que dirigió el arquitecto Juan Cuenca. La restauración de la Puerta del Puente ocurrió en el 2007 y con ella se llevó a cabo una reconstrucción volumétrica de los sillares de biocalcarenita, que, según el proyecto, presentaban pérdidas materiales, principalmente, la sillería del zócalo de la cara sur, mediante morteros de cal armados con varillas de acero inoxidable y malla plástica. Los estudios realizados posteriormente indican que "el comportamiento de esos morteros no ha sido el apropiado, y, si bien han estado protegiendo los sillares originales, su adhesión a los mismos no ha sido suficiente y en la actualidad se encuentran en su mayor parte desprendidos, habiendo dejado a la vista las mallas y las estructuras metálicas que constituían su armazón". En el 2019 ya se produjo un saneado, que llevó a cabo Patrimonio Inteligente.

La Puerta del Puente es una reedificación de 1775 de Hernán Ruiz III que sustituyó a la que existía en el lienzo sur de la muralla de la ciudad. En 1912 la Puerta del Puente quedó aislada de su entorno y en 1928, una vez derribada la muralla, se reprodujo en el interior el diseño del exterior.