Los investigadores de la Policía Nacional de Córdoba han logrado dar un importante paso adelante en la resolución de un complicado caso de estafas que se reparten por toda España. Los agentes encargados de la investigación han conseguido identificar a una mujer como la presunta responsable de más de 20 delitos de estafa, 29 de falsedad documental así como de usurpación de estado civil, que operaba en toda la geografía nacional, donde ha dejado un reguero de víctimas y entidades bancarias perjudicadas. Según informa la Policía en una nota de prensa, la presunta estafadora abría cuentas bancarias y solicitaba créditos con documentación personal falsa, que obtenía mediante engaño a través de las redes sociales. Según la fuentes policiales consultadas por este periódico, la mujer aún no ha sido detenida, pero ya saben quién es.

La investigación se ha llevado a cabo desde Córdoba

La investigación se inició en el mes de abril del pasado año a raíz de la denuncia de un afectado. La Policía analizó abundante documentación en relación a las cuentas bancarias fraudulentas, obteniendo como resultado mas de 20 presuntas estafas cometidas a personas de toda la geografía española, siendo cinco de ellas las denunciadas en la provincia de Córdoba, esclareciendo todos los casos e imputando a una persona como presunta autora de los hechos. 

Operaciones 'on line', identidades falsas y microcréditos para evadir el control fiscal

La Policía destaca que la parte técnica de la investigación ha sido de especial importancia y de mucha dificultad, debido a la existencia de identidades en principio falsas, a la existencia de intermediarios y a la utilización de Internet para llevar a cabo la operativa bancaria y crediticia. Al final, los agentes concluyeron que la principal sospechosa realizaba esta actividades ilícitas desde un punto remoto -lejos de Córdoba- y enmascaraba supuestas compras que nunca se llevaban a cabo, pero que servirían de soporte para la solicitud de los créditos fraudulentos. De esta forma, una vez obtenidos los microcréditos a través de la red, el dinero era desviado a diferentes cuentas bancarias para así evadir el control fiscal.