La consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación visitó ayer Córdoba, unos días después de haber anunciado su intención de participar en el proceso de primarias para liderar el partido naranja de cara a las próximas elecciones andaluzas.

Cs está que arde. Tras el episodio de Murcia y Madrid, ahora parece que se abre una nueva etapa en Andalucía por el liderazgo del partido con un pulso entre usted y el vicepresidente de la Junta, Juan Marín. ¿Cómo encara ese proceso?

No estamos en ese momento. Lo ha dicho el presidente, no va a haber adelanto electoral, somos un gobierno muy estable y lo que necesita Andalucía es estabilidad. Por mucho que otros partidos quieran elecciones ahora, ni el Gobierno andaluz está en eso ni los andaluces lo merecen. Tenemos sobre la mesa un montón de proyectos y si hacemos un parón de cinco o seis meses para unas elecciones sería un desastre. Cuando toquen elecciones, los estatutos de Cs recogen que tiene que haber primarias. Cs ha sido un proyecto político con democracia interna en el que los afiliados son lo más importante y hay que darles voz. Estamos pasando por momentos difíciles y lo que hay que intentar es impulsar el partido desde la unidad y cuando toque, escuchar a la militancia, que es la que está a pie de calle. Hemos estado mucho tiempo reconstruyendo la estructura después de que Inés Arrimada fuera nombrada presidenta y ya tenemos las herramientas.

¿Qué futuro augura a Ciudadanos?

Yo no pienso en el futuro porque es todo tan volátil... Nadie podía imaginar lo que ha pasado en tan poco tiempo, mañana puede cambiar todo. Creo que nuestro papel en Andalucía ha sido clave porque después de que el PP intentara 37 años llegar al Gobierno, solo ha podido hacerlo de la mano de Ciudadanos. Hemos aportado la moderación, el centro, y desde mi Consejería políticas sociales muy progresistas.

La recepción de 13 menas (menores extranjeros no acompañados) desde Ceuta fue motivo de trifulca en el Parlamento con Vox. ¿Cuál es la situación de estos niños?

Estamos esperándolos. El sistema de protección de Ceuta tenía 200 plazas y ahora tienen 4.000 niños más, la situación es desesperante. Hablamos de una crisis humanitaria que afecta a menores de 4 a 10 años, así que estamos a la espera de que el Ministerio nos los envíe y los integraremos en nuestro sistema de protección como a los otros 3.000 que tenemos actualmente, de los cuales unos 1.700 son menores migrantes.

En la campaña de Madrid salió a relucir el coste público del mantenimiento de estos menores con cifras alejadas de la realidad. ¿Se puede cuantificar ese coste?

Esa comparativa que hacía Vox en su cartel con la pensión de un mayor no es real porque ellos no reciben una pensión. El sistema de protección de menores equipara a todos los niños independientemente de su procedencia. Sería como poner precio a la dignidad de una persona, a cuánto valen sus derechos.

El problema se da cuando esos niños cumplen la mayoría de edad y pasan a estar en una especie de limbo.

No están en un limbo, hemos recogido en la nueva Ley del Menor que todos los extutelados tengan protección hasta los 25 años si no consiguen la autonomía. Cuando llegamos, en el sistema de extutelados andaluz había 213 plazas para quienes quieren seguir formándose y buscando empleo. Ahora hay el triple, 848, todas cubiertas, y vamos a seguir sacando más. Es impensable que un niño a los 18 años se quede en la calle. Sería importante incorporar en el ingreso mínimo vital la franja de edad de 18 a 22 años, es una de las enmiendas presentadas a un ingreso mínimo que no termina de llegar al Congreso. Nuestro nuevo ingreso, que queremos que sea compatible con el estatal, incorpora a estos niños extutelados para que tengan una renta mínima.

El principal error del ingreso mínimo vital es que se ha hecho de espaldas a las comunidades

El ingreso mínimo vital y la renta mínima de inserción de las distintas comunidades suponen una maraña burocrática para muchos ciudadanos. ¿No sería factible unificar esas ayudas?

Nosotros teníamos esperanza en el ingreso mínimo vital, pero ha caído en los mismos errores de las otras las rentas. Son procedimientos muy complejos que se dilatan tanto en el tiempo que no cumple el objetivo de atender a personas muy vulnerables. El principal error es que se ha hecho de espaldas a las comunidades. Todas teníamos una renta que era incompatible y eso no se ha previsto. Nuestro nuevo ingreso, denominado por la infancia y la inclusión, será compatible con el mínimo vital y será interoperable, con cinco requisitos para cruzar los datos y que sea muy ágil. Se basará en programas de inclusión social y familiar de aquellos que abandonan el sistema educativo de forma prematura y están abocados a la exclusión y el desempleo. Estamos esperando que el ingreso mínimo se apruebe en el Congreso de los Diputados para sacar el nuestro.

¿En qué fase está esa Ley de la Infancia?

Queremos que vaya al Parlamento a finales de julio.

En materia de violencia de género, Vox ha solicitado la retirada de subvenciones a las asociaciones que trabajan contra la violencia machista, que ellos niegan. ¿Esas ayudas están garantizadas?

El Instituto Andaluz de la Mujer tiene diferentes líneas de subvenciones. Unas son directas a las víctimas, otras de exclusión social para mujeres en situación de vulnerabilidad, hay nuevas líneas para víctimas de trata y luego están las subvenciones que van a las asociaciones de mujeres, cuya dotación no solo no ha bajado sino que se ha incrementado. En 2018, el importe era de 3,2 millones, y ahora estamos en más de 7 millones. Hubo un problema con Intervención y se han hecho unas nuevas bases reguladoras más transparentes que dan más seguridad jurídica.

¿Respalda usted la petición de indulto de Juana Rivas?

Las decisiones judiciales hay que respetarlas siempre para evitar hacer juicios paralelos, aunque espero que se resuelva favorablemente.

Ha habido un repunte desde el fin del estado de alarma de víctimas de violencia de género. ¿A qué lo achaca, qué se está haciendo mal?

Es difícil erradicar una lacra arraigada a una cultura patriarcal. Si alguien quiere asesinar a su pareja, lo va a hacer. Por eso hay que seguir haciendo campañas de concienciación. En dos años, han aumentado un 30% las llamadas, eso no significa que haya más casos sino que confían más. Luego, hay cuestiones a medio y corto plazo que tienen que ver con la educación. Hay que llevar a las aulas ese cambio de rol, la educación afectivo sexual es fundamental. Estamos con una app muy buena de educación para erradicar estas relaciones tóxicas. Si se educan con la pornografía, qué se puede esperar. La ley de infancia contempla todo lo que se produce en la red para ponerle coto. La infancia es clave, es el principio de todo, tenemos que conseguir una educación en igualdad.

En el 2019 tuvo que dejar una marcha Lgtbi abucheada por el colectivo. ¿Acudirá este año, ha cambiado su relación con ellos?

En mi vida personal y profesional he sido muy activista por la tolerancia del colectivo Lgtbi. No comprendía que me miraran con odio y me llamaran fascista. Desde entonces, hemos dado tantos primeros pasos con ellos que al final las cosas caen por su peso. A veces, nos dejamos llevar por prejuicios, pero yo siempre me niego a politizar. Ni la violencia a la mujer ni los derechos Lgtbi pueden ser moneda de cambio. Me da igual a quién votes porque siempre voy a estar por los derechos humanos. Y luego todo se da la vuelta. A mí me echaron en 2019 y ahora no quieren que vaya el PSOE por su postura ante la ley trans.

Siempre he defendido un feminismo inclusivo donde quepamos todos. Creo que ese nuevo feminismo creará más adeptos

¿Cómo interpreta el giro del feminismo ante la ley trans?

El feminismo tiene que evolucionar, el feminismo no es ese en el que las mujeres hacen un búnker y piensan que las mujeres trans las borran, que les van a quitar sus derechos, yo no lo entiendo. Yo siempre he defendido un feminismo inclusivo donde quepamos todos. Creo que ese nuevo feminismo creará más adeptos en la lucha por la igualdad. El otro es un feminismo excluyente que no aporta nada.

Córdoba tiene cinco de los barrios más pobres de España. ¿Qué pasa con el programa Eracis?

La pobreza en Andalucía es un problema estructural, heredada de padres a hijos. Nunca entendí que después de tanto dinero invertido siguiéramos igual y yo creo que algo no se ha hecho bien. El programa Eracis tiene fondos europeos y partía de la base de la intervención social y familiar en los barrios pobres, pero con planes sin continuidad y mucha falta de coordinación. Nosotros hemos sacado unas nuevas bases reguladoras para simplificar los trámites y evitar a las oenegés procedimientos engorrosos, estamos trabajando en una estrategia integral a medio plazo contra esa pobreza estructural que incidirá sobre todo en la coordinación de las entidades. Los milagros no existen y ya sabemos que lo que se ha hecho no ha servido.

El sistema de dependencia arrastra un grave problema de infrafinanciación. ¿Qué propone Cs?

Hace falta un pacto de Estado como el de la violencia de género. Hay políticas que tienen que estar fuera de la lucha partidista. Toda la nación tiene que blindar el presupuesto de la dependencia para que sea sostenible.

¿Cómo se puede compatibilizar el aumento presupuestario en tantas materias con la bajada de impuestos que proponen?

Los expertos dicen que en momentos de crisis hay que reactivar la economía teniendo la gente el dinero en el bolsillo, atraer la inversión simplificando los obstáculos administrativos y bajando los impuestos para que la gente pueda consumir. Eso se está haciendo en otros países como Portugal y funciona. Es lo que toca en momentos de crisis, lo que no tocan son los peajes, subir el diesel ni subir la luz. Hay que revisar la política económica.

¿Cree que Cs debe ir el domingo a la protesta de Madrid contra los indultos de Cataluña?

Yo solo pido que no se politice, que cada uno vaya libremente si considera que el indulto no es la solución para Cataluña, Yo creo que no lo es, que se trata de un pago de Sánchez por los apoyos prestados. Quien quiera que vaya con libertad, sin que nadie monopolice la protesta porque eso haría un flaco favor a la ciudadanía.

¿Se ve en otro partido?

Ciudadanos es el proyecto que más coincide con mis valores y principios y si desaparece no sé qué haré. Lucharé hasta el final por esta alternativa al PSOE, PP y otras cosas. No queremos dejar huérfanos a esos votantes.