Miembros de cinco asociaciones vecinales del casco histórico de Córdoba han protagonizado esta tarde un corte de vía autorizado y concentración en la San Fernando para mostrar su rechazo a la instalación de nuevos espacios de ocio y hostelería en la zona, tras el anuncio de la concesión de licencia de un nuevo establecimiento de estas características en el solar vacío situado en la esquina de la Cruz del Rastro (Ronda de Isasa 2). La protesta, a la que han acudido en torno a un centenar de personas, ha tenido lugar a mediodía, coincidiendo con las salidas de los colegios, lo que ha llevado a la Policía Local a regular el tráfico para que los autobuses pudieran pasar.
No es la primera reacción contraria al proyecto, ante el que recientemente la Federación de Asociaciones Vecinales Al Zahara reclamó garantías de que respetará el entorno. El alcalde, José María Bellido, contestó a esta petición que "el proyecto cumple la normativa, que generará empleo y que lo que es malo para la zona es que haya solares vacíos". Cabe recordar que la licencia fue aprobada con el respaldo unánime de los grupos municipales presentes en el Consejo Rector de Urbanismo y que las alegaciones presentadas en su día fueron rechazadas.
Representantes vecinales han criticado que el Ayuntamiento no les haya informado de la concesión de la licencia de actividad pese a que presentaron alegaciones contra el proyecto y solicitaron que se declarara esta zona como acústicamente saturada (ZAS).
Más vecinos y menos locales de ocio
Los vecinos del casco exigen al Ayuntamiento que en lugar de instalar más bares y restaurantes actúe sobre los "innumerables solares y casas en ruinas y vacías" para que vuelvan a ser ocupados por residentes porque, insisten, "lo que queremos es que vuelvan a venir vecinos a vivir al casco histórico" y que los que se instalen "tengan derecho al descanso".
Las asociaciones Axerquía, La Medina, San Lorenzo Existe, Galea Vetus y Regina-Magdalena coinciden en que el Ayuntamiento de Córdoba debe desarrollar las propuestas planteadas y aplicar los usos del casco histórico recogidos en las conclusiones de la comisión de usos del 2019 y en la moción sobre el casco histórico que fue, recuerdan, "aprobada por todos los grupos políticos en el Pleno Municipal del 17 de septiembre del 2020". Asimismo, plantean la necesidad de revisar el Plan Especial del Casco Histórico para reconocer esta zona como "de uso preferentemente residencial" y que el Ayuntamiento "no se retrotraiga al PGOU de 1986". En opinión de los vecinos, el objetivo es "proteger el patrimonio monumental, cultural y natural, así como el patrimonio humano del casco" y dotar este área de la ciudad de "equipamientos deportivos, comercios y sociales para los residentes".
