El alcalde de Córdoba, José María Bellido, ha abogado por permitir la movilidad interprovincial que debatirá esta tarde el comité de expertos y ha avanzado que de producirse un incremento de visitantes a la fiesta de los patios, que se celebra a partir del lunes en Córdoba, se incrementarán las medidas de seguridad. Aunque ha señalado que este año, que se cumplen 100 años de los Patios, no se tenía un objetivo turístico por la situación de pandemia, si se produce un incremento a raíz de la apertura entre provincias “todo el que quiera venir es bienvenido”, al tiempo que ha reivindicado los patios como una fiesta segura.
En este sentido, entiende que los patios son un reclamo turístico de primer orden, aunque no fuera su objetivo principal este año, y ha asegurado que el Ayuntamiento de Córdoba y los propietarios de patios están preparados para que sea una fiesta segura. En esta línea, Bellido ha recordado que se ha establecido un control de aforos, que se emplea inteligencia artificial y big data para el control de los mismos, así como drones, y que se dispone de la herramienta Pegaso de la Guardia Civil. Asimismo, el alcalde ha valorado que los patios son seguros por su propia naturaleza: al ser recintos abiertos y cerrados, donde se puede controlar el aforo; al igual que es seguro discurrir entre patio a patio porque también es cotrolable. En todo caso, si se produce un incremento durante estos días de turistas, el Ayuntamiento reforzaría las medidas de seguridad y la campaña de promoción de los patios.
Apertura entre provincias y fin del estado de alarma
El regidor cordobés considera que la Junta de Andalucía siempre ha estado a la altura desde el estallido de la pandemia y si ahora considera que habría que adoptar medidas encaminadas a permitir la movilidad interprovincial “las respaldo públicamente”. Bellido afirma que esa apertura está respaldada por los avances de la inmunidad gracias a las vacunas, la mejora de las condiciones sanitaria y la necesidad económica que tenemos. “Parece que la intención de la Junta es ir abriendo la mano de las restricciones de forma gradual”, ha añadido.
En todo caso, aunque se ha mostrado a favor de esta apertura, el alcalde ha aprovechado para expresar su preocupación por el fin del estado de alarma el próximo 9 de mayo y ha reclamado al Gobierno central que dote a las administraciones locales de “herramientas legales para el control de situaciones de riesgo”. En este sentido, ha puesto el ejemplo de la dificultad que tendrá la plantilla de la Policía Local para controlar los botellones o las reuniones en establecimientos privados. “Si no hay plan b pueden ser complicadas algunas situaciones”, ha reiterado, “soy partidario de la relajación de medidas, pero hay cuestiones como esta para las que nos tienen que dotar de herramientas legales para el control de situaciones de riesgo. Si no será complicado llegar a todo, lo digo con antelación y humildad”, ha concluido.
