¿Puede un caballo de una alzada de 1,57 metros saltar una altura similar? ¿Tiene corazón suficiente para realizar un recorrido de Gran Premio y competir con potentes ejemplares centroeuropeos? ¿Puede realizar el sueño de un jinete al que obsesiona un salto de hace 60 años?
Un ejemplar así ser ía un regalo de la naturaleza y así sucedió con Regalito , una jaca de campo antigua, un caballo cruzado, que corría liebres en la campiña, propiedad de Antonio Raya. El caballo lo compró uno de los «grandes» de la equitación cordobesa, José Vílchez, que se lo vendió a Ángel Peralta Astolfi, un jinete nacido en Sevilla, pero asentado en Córdoba desde hace años.
Y s altó la primera sorpresa en esta última transacción. Regalito , como era conocido en la campiña, no tenía nombre, era un caballo innominado, solo un mote. Peralta, nieto del rejoneador Ángel Peralta Pineda, lo bautizó como Brinca , en honor del primer animal que tuvo, una yegua., que le regaló su abuelo.
El binomio Peralta- Brinca comenzó a identificarse y a trabajar en espectáculos ecuestres, mostrando todo el potencial que tiene el cruzado. Y el año pasado, en una exhibición en Córdoba, Brinca saltó un metro y medio.
¿Casualidad? Hay caballos que en una circunstancias determinada sortean una apreciable altura.
El osado Peralta, jinete también de salto, probó a Brinca y valoró sus posibilidades en esta disciplina, dominada por los orgullosos ejemplares centroeuropeos.
Brinca compitió en salto. y apareció la segunda sorpresa. En el Gran Premio de Sotogrande, en Cádiz, uno de los sanctasanctórum de la hípica, el caballo estuvo a punto de ser eliminado por los jueces por «peligrosidad», pensando que una jaca tan pequeña no podría competir. Los convencieron y fue la sorpresa de la competición, realizando un recorrido que Peralta calificó de «épico».
Actualmente, Brinca compite en Gran Premio sobre alturas de 1,35, obstáculos que sortea sin dificultad, aunque en entrenamientos llega a saltar 1,45 metros. El ejemplar ha evolucionado en las alturas gracias, entre otros, a un jinete de elite, el gaditano Carlos Bosch, que prepara al caballo para recorridos con más altura.
Otra sorpresa más en la ajetreada vida de Regalito/Brisca es el potencial que tiene para esta disciplina exigente, llamando la atención de un espónsor, fundamental para competir por cualquier pista de salto de España. Se trata de la empresa Equus Digital Media, que ha obligado de nuevo a este caballo en principio innominado a conseguir su tercer nombre, segundo de manera oficial, el de Equus Digital Media , con el que Bosch lo compite en la actualidad.
Este regalo que ha sido el caballo para el versátil Ángel Peralta Astolfi, no alcanza su cénit en competiciones de Gran Premio en saltos de obstáculos. El regalo ha despertado un sueño en el jinete.
Peralta es un jinete que compite en diversas disciplinas hípicas y los retos en el mundo del caballo siempre le han atraído. Concursó en saltos de obstáculos con un pura raza español y participó en el Campeonato del Mundo en el Sicab.
Ahora pretende rememorar el salto sobre una valla en el campo que realizó hace 60 años su abuelo Ángel Peralta Pineda, con Discutido , llevando el rejoneador en la mano derecha una garrocha. Un salto espectacular del que hay una prueba gráfica, una fotografía que es la obsesión de su nieto.
El recorrido del animal a lo largo de su vida ha sido ajetreado, desde correr liebres en la campiña, su estancia en el picadero de José Vílchez, el estrellato en espectáculos y exhibiciones ecuestres y la alta competición, a ser el eje de un reto, un sueño, una obsesión de un jinete.
¿Cambiará Regalito-Brinca-Equus Digital Media nuevamente de nombre y se llamará dentro de poco Discutido ?
