La Gerencia de Urbanismo tiene 4,5 millones de euros de dudoso cobro que da por perdidos

Las administraciones no cobran todo lo que contemplan sus cuentas anuales. Como ejemplo está que la Gerencia de Urbanismo tiene plasmados en sus cuentas del 2018, a las que su consejo rector dará el visto bueno el miércoles, 4,5 millones de euros considerados como de "dudoso cobro" y para los que se dotaron en ese ejercicio “provisiones para insolvencias”. Se trata de deudas que van más allá del año 2018 y que da prácticamente por perdidas. Así, esa cifra incluye el 25% de los derechos pendientes de cobro liquidados en los presupuestos del 2016 y 2017; el 50% de los del 2015; el 75% de los del 2014 y 2013; y el 100% de los del 2012 y anteriores.

El ejercicio 2018 acabó con un resultado positivo de 3,1 millones de euros, es decir, de 9,77 euros por habitante; y con unos remanentes de Tesorería de 4,1 millones. Las principales fuentes de financiación de la Gerencia de Urbanismo durante el 2018 fueron las transferencias del Ayuntamiento, que aportó 10,9 millones (el 92,52%); las concesiones administrativas y derechos de superficie, que le reportaron 521.637 euros (un 4,39%); y las tasas, con las que consiguió 272.882 euros (un 2,30%). Todo ello, en cuanto a ingresos no afectados. En ingresos finalistas, Urbanismo logró 419.987 euros a través de transferencias del ente matriz (un 88,97%); cero por aprovechamientos urbanísticos; y 52.068 euros por venta de suelo (un 11,03%).

En cuanto a las parcelaciones, Urbanismo no ha recibido nada de lo que tenía previsto en aprovechamientos urbanísticos, es decir, el dinero que debe cobrar de las que están en vías de regularización por la cesión del 10% de suelo. En cambio, y al contrario de lo que ha ocurrido en ejercicios anteriores, Urbanismo ha recaudado durante el 2018 más por la figura del Asimilado al Fuera de Ordenación (AFO), para la que tenía contemplada una partida de 151.000 euros, pero ha recibido 42.784 euros más.

Las cuentas del año pasado reflejan las dificultades que sigue teniendo Urbanismo en la enajenación de suelo, ya que de 1,4 millones que preveía recibir por ventas de terrenos, solo ha ingresado 52.068 euros y le quedan por percibir 1,3 millones.

Según la cuentas, la inversión por habitante en el 2018 fue de 4,58 euros y el esfuerzo inversor estuvo en el 0,15% al haber solo 1,4 millones en obligaciones reconocidas netas. En cuanto al gasto por habitante, fue de 31,51 euros en base a los 10,2 millones de obligaciones reconocidas netas, situándose en 0,24% la ejecución del presupuesto de gastos. En cuanto al presupuesto de ingresos, el índice fue del 0,29% en base a los 12,3 millones de derechos reconocidos netos. El periodo medio de pago a acreedores comerciales fue de 31,86 días y el endeudamiento por habitante, de 36,83 euros.

En el documento que verá el miércoles el consejo rector aparece una larga lista de proyectos que se remontan incluso al año 1991 y respecto a los que Urbanismo aún tiene dinero pendiente de destinar, entre ellos, el plan especial del río en la zona del puente de Miraflores; el plan especial de la Sierra; el Urban Sur; la ronda Norte; la urbanización de Villarrubia; y la ampliación de la carretera de Trassierra. En total, de un gasto previsto de 109,3 millones desde la década de los noventa hasta ahora, le quedan 28,5 millones por emplear.