La Asamblea Extraordinaria de hermanos mayores de la Agrupación de Cofradías aprobó la noche de ayer, con 38 votos a favor y 3 abstenciones, "la reprobación de la gestión económica realizada por la anterior junta de gobierno de la Agrupación de Hermandades y Cofradías" por considerar "que ha sido negligente e irregular con arreglo al informe pericial efectuado por Auditest SL del ejercicio económico del año 2012 y presentado a la Asamblea", explica un comunicado difundido por la Agrupación a medianoche; en el que añade que esta decisión se comunicará "a la autoridad eclesiástica para que tome las medidas que considere oportunas". Hay que recordar que la Agrupación de Cofradías, al ser una entidad eclesiástica, tiene limitada la capacidad de acudir en su propio nombre a los juzgados.

Pese al lacónico comunicado y a la discreción que mantenían anoche los responsables cofrades, entre las irregularidades detectadas por la auditoría se encuentran, según ha conocido este periódico, una serie de "gastos sin facturas", como los que se mostraron en el Anexo 2 del informe, entre los que se encuentra el programa de gestión de palcos y sillas de Carrera Oficial o la web de la Agrupación y su mantenimiento, gastos de un congreso, limpieza de la sede, etcétera.

HISTORIA DEL CONFLICTO El conflicto comenzó, al menos en su aspecto formal, cuando se conoció que un informe del ecónomo del Obispado, José Luis Vidal, rechazaba las cuentas de la Agrupación de Cofradías del año 2012 (el último año de mandato de Juan Bautista Villalba al frente de la presidencia de la entidad), todo ello debido a "presuntas irregularidades contables", según se explicó en el Pleno de la Sección de las hermandades de penitencia de la Agrupación de Cofradías del 2 de diciembre del pasado año.

Apenas tres semanas después, el 18 de diciembre, la Asamblea de Hermanos Mayores de la Agrupación de Cofradías acordó "la realización de una auditoría externa sobre las cuentas no aprobadas en el ejercicio anterior, con el fin de lograr el esclarecimiento de las mismas". Una vez concluido y presentado aquel informe, se llevaría a la asamblea para que sus componentes "tomaran las resoluciones oportunas".

Desde que se formalizó el mandato de la auditoría externa, para lo que se escogió a la firma Auditest SL, hasta la presentación de sus resultados en la Asamblea de anoche han transcurrido algo más de seis meses, periodo durante el cual el expresidente de la Agrupación, Juan Bautista Villalba, ha mantenido un escrupuloso silencio al respecto ante los medios de comunicación.