Este año los pasillos de Fitur son más espaciosos, más amplios, y los trayectos entre los distintos pabellones se transitan con mayor facilidad. Jamás, en los últimos veinte años, se habían visto tantos claros en la que es la segunda feria de turismo más importante del mundo. Y es que, aunque esta actividad es la primera industria de España y la única que parece estar resistiendo las dentelladas de la crisis, no ha podido escapar a los recortes y este año han sido muchos los expositores que han dejado se asistir.