Asaja Córdoba ha solicitado a la Junta de Andalucía el pago inmediato de las indemnizaciones que se comprometió a dar a los ganaderos afectados por la lengua azul. Según la organización agraria, "no se puede olvidar que el sector del ovino está sufriendo un auténtico calvario por la crisis de precios, la subida de los costes de producción y la lengua azul". Por ello, añade en un comunicado, "la Junta debe cumplir sus compromisos de forma inmediata, debe exigir al Gobierno central la adopción de medidas fiscales que beneficien a los ganaderos, y debe centrar sus esfuerzos en la puesta en marcha inmediata del desacoplamiento total de las ayudas".

En el 2007 la enfermedad de la lengua azul afectó a la mayor parte de las explotaciones ovinas de la provincia de Córdoba, llegando a ocasionar la muerte a unas 70.000 ovejas sólo en nuestra provincia. Asaja recuerda que la Junta estableció indemnizaciones para apoyar al sector ovino, "aunque insuficientes, debido a que la enfermedad dejó muy mermada la capacidad productiva de las explotaciones de ovino" y "la realidad es que el ganadero ha recibido muy poco dinero hasta la fecha". Para Asaja, "la enfermedad se produjo por la falta de medidas preventivas de la Administración, siendo los ganaderos simples sufridores de la negligencia de otros".

Muchos ganaderos, afirma Asaja, cobraron las primeras actas de indemnización de los animales muertos en los meses de agosto y septiembre de 2007 y le quedan por cobrar más de la mitad del total de las ovejas muertas en los meses de octubre, noviembre y diciembre. Otros ganaderos aún no han cobrado ninguna indemnización. Asaja estima que pueden quedar por cobrar entre un 30% y un 40% de las ovejas muertas en la provincia de Córdoba, lo que asciende a más de 2 millones de euros, ya que la indemnización era de unos 100 euros por animal muerto.