La FAPA Agora no consiguió ayer arrancar una postura única y firme de apoyo por parte de los sindicatos de enseñanza a su proyecto de crear la figura del monitor de centro en los colegios de educación Infantil. No obstante, sí se llegó a un acuerdo para exigir a la Consejería de Educación que inicie las negociaciones, en mesa sectorial, con el objetivo de solucionar las actividades de carácter asistencial en educación Infantil. Dicho acuerdo, que será enviado a la consejera de Educación, fue rubricado por la FAPA Agora y por los sindicatos CCOO, ANPE, FETE-UGT y SADI. La coordinadora de APAS de Infantil, aunque asistió a la reunión, no firmó la carta.

No asistieron a la reunión, pese a estar convocados, los sindicatos CSI-CSIF, Ustea y SIEP, representados en la junta de personal docente, que firmaron en el último pleno de este órgano una propuesta para solicitar el monitor de Infantil.

La presidenta de la FAPA Agora, María Arévalo, reconoció tras la reunión de ayer que es muy difícil acercar posturas porque "en este asunto cada uno tiene su proyecto". Reconoció que el debate había sido duro, "pero al final hemos tenido que ceder todos un poquito" y llegar sólo a esta decisión de instar a la consejería a que abra la negociación sobre la figura del monitor de apoyo a educación Infantil. Por ello, María Arévalo calificó el acuerdo de "relativo".

De momento, y a la espera de la respuesta de la Administración educativa, la presidenta de la FAPA Agora anunció que se suspendían las acciones de protesta protagonizadas por los alumnos de Infantil y sus padres durante los últimos tres lunes, que han registrado un importante seguimiento.