La situación prebélica por la crisis de Irak está comenzando a preocupar a los joyeros cordobeses al producirse en los últimos doce meses un fuerte incremento del precio del oro (ha subido un 24% entre febrero de 2002 y el mismo mes de 2003). A las tradicionales dificultades que se han adosado al sector en los últimos dos años (inspecciones de la Agencia Tributaria por el caso IVA y recesión en las ventas a nivel nacional e internacional) se ha unido también la subida del oro, que ha pasado de los 299 dólares la onza troy (equivale a 31,10 gramos) a los 371,10 dólares que cotizaba la onza el viernes en el mercado de Nueva York.

EL 80% DEL PRECIO FINAL

Esta incidencia del precio de la materia prima tiene aún mayores efectos en los fabricantes cordobeses, donde el valor del oro supone el 80% en el precio final de venta del producto. El presidente de la Asociación Provincial de Joyeros, Alfonso Cabrera, aseguraba ayer que mientras se mantenga la situación prebélica mundial "no se verá una pronta salida de la crisis, que ya comienza a ser preocupante". Cabrera precisó que las ventas, al incrementarse los precios del producto final por la cotización creciente del oro, se están viendo mermadas. Por ello, confía que con la llegada del día de San Valentín (14 de febrero) se pueda producir un repunte en las ventas. Como mal menor, el presidente de los joyeros cordobeses reconoce la revalorización que tiene siempre una joya o la favorable paridad del euro con el dólar, ya que esto palía en parte la subida del oro.

Otros joyeros consultados por este periódico reafirmaban ayer la situación de incertidumbre provocada por la subida de los precios del metal precioso. "Es necesario que vuelva la estabilidad, porque con tantas oscilaciones se pierde la ganancia del producto final, crea inseguridad y repercute en la producción", afirmaba un fabricante cordobés perteneciente a la Asociación de Fabricantes San Eloy.

INVERSION REFUGIO

Este joyero reconoce que en el último año se han acumulado distintos factores que han ayudado a revalorizar el oro, desde el atentado del 11 de septiembre en las Torres Gemelas de Nueva York a la crisis de las empresas de nueva tecnología, la pérdida de confianza en las bolsas o la crisis de Argentina. "Los inversores han vuelto a considerar el oro en el último año como valor refugio", señala este empresario.