El Córdoba CF doblega al líder y hace soñar a El Arcángel

El Córdoba CF se impuso al Castellón, que llegó a Córdoba como líder del Grupo 2 de Primera Federación, con goles de Kike Márquez y Simo Bouzaidi, ambos en el segundo acto, tras uno de los mejores partidos en los últimos tiempos de los blanquiverdes, que se impusieron tras un duelo intenso. Con los tres puntos, el equipo de Iván Ania se sitúa a cinco del equipo orellut y recorta distancia con la cabeza de la tabla clasificatoria, justo cuando en la previa la preocupación era lógica, tanto por el nivel del rival como por el momento del Córdoba CF, con alguna baja de gran importancia, como la de Dragisa Gudelj.

Intensidad en El Arcángel

Y lo cierto es que el partido respondió a las expectativas. Al menos, en lo que a juego, intensidad, disputa y fútbol se refiere por parte de los dos adversarios. Porque el Córdoba CF y el Castellón brindaron unos primeros 45 minutos plenos de competitividad, emoción y juego. Iván Ania demostró que se había trabajado el partido a lo largo de la semana y para ello necesitó de las piernas de sus jugadores, también de su generosidad. Porque la presión del Córdoba CF en ese primer acto fue tremenda.

Pero no porque Isma Ruiz actuara a modo de tanqueta en todo el eje de la medular. O que Youssouf Diarra lograra robar varios balones en línea de tres cuartos y buscara siempre la espalda de los hombres orellut que actuaban por dentro. Tampoco porque Christian Carracedo volviera a erigirse en la mejor referencia ofensiva del conjunto blanquiverde, mostrando una vez más verticalidad y peligro. Más o menos, aunque con mayor intensidad, eso ya se había visto en el Córdoba CF. Lo que más llamaba la atención es que hombres como Antonio Casas o Kike Márquez, así como Adilson Mendes, jugadores que no son un dechado, precisamente, de valores defensivos, se convirtieron en esa primera parte en la primera línea de defensa cordobesista y presionaron como si de mediocentros se tratasen. La idea era intentar que el conjunto de Schreuder no saliera con el balón controlado por dentro o, al menos, que no lo hiciera con comodidad. Y vaya si lo lograron los hombres de Ania.

Discutir el balón

En los primeros minutos de partido pudo contemplarse sobre el césped de El Arcángel una pelea denodada por lograr la posesión y darle la continuidad. Parecía que el Córdoba CF conseguía, al menos, discutirle el balón al Castellón, aunque este fue progresivamente mostrando más y más virtudes con el balón al pie. Lejos de incomodarle, al Córdoba CF parecía venirle bien ese momentáneo cambio en la película de partido, ya que la primera ocasión la firmó el conjunto blanquiverde, precisamente, con un balón largo que recibía Carracedo a la espalda de su marca, lo que aprovechaba el extremo blanquiverde para avanzar hasta el área orellut y, solo ante Gonzalo, se topaba con el portero castellonense (min. 8).

Un minuto después Diarra no aprovechaba del todo el error de Chirino. El mediocentro cordobesista le robaba el balón y se iba hacia la portería rival, pero de nuevo tropezaba con el arquero argentino. El detalle estaba en que el Córdoba CF, más que presionar la salida de balón en primera línea, apretaba más en el mediocampo, al segundo receptor blanquinegro, que casi siempre era uno de los hombres de la medular castellonense. Y obtenía bastante éxito.

En cualquier caso, el Castellón demostraba su nivel de líder y en el minuto 11 veía cómo Alberola Rojas le anulaba un gol anotado por Jesús de Miguel por fuera de juego, tras buscar el máximo goleador blanquinegro la espalda a la defensa cordobesista.

El gran duelo entre Manu Sánchez y Calderón provocó un parón de tres minutos en el minuto 12, cuando ambos chocaron sus cabezas y tuvieron que ser atendidos. Una vez recuperados, el rato en el que estuvieron los médicos sobre el césped pareció enfriar algo los ánimos, que no el juego de ambos equipos.

Tras un par de llegadas de ambos a las porterías rivales, el partido volvió a cambiar. El Córdoba CF logró mantener cada vez más el balón y volvió a aparecer en varias ocasiones Christian Carracedo. Una, en el minuto 33, cuando conectó con Adilson, aunque el portugués disparó demasiado fácil para Gonzalo Crettaz.

La última llegada clara del Córdoba CF en el primer acto la protagonizó Kike Márquez, con dos grandes acciones: una, robando el balón a Josep Calavera, y la segunda, con un disparo duro abajo, ajustado al poste, que se marchó por poco (min. 38). El Castellón también seguía avisando, como en el minuto 42, con un balón de Medunjanin que cabeceó alto Jesús de Miguel.

Alberola Rojas mandó a todos a las duchas y la sensación es que los 45 minutos se habían hecho cortos y que al Córdoba CF tan sólo le faltó el resultado. La intensidad de la primera parte provocaba también una pregunta: ¿hasta cuándo aguantarían las piernas?

Nada más volver, gol

La pregunta sería respondida inmediatamente por el Córdoba CF, que se metió algo de gasolina con el gol de Kike Márquez en el minuto 53 y cuando todo hacía indicar que el guion de la segunda parte sería distinto. Y vaya si lo fue. Pero porque el equipo de Iván Ania se adelantó en el marcador, lo que provocó no sólo que El Arcángel subiera decibelios para apoyar a su equipo, sino que este recibió un punto más de fe para lograr los tres puntos al final de los 90 minutos.

El Castellón comenzó a habituarse a merodear el área de Carlos Marín, pero sin ocasiones. Sí, sumaba llegadas, provocaba la preocupación, pero ésta moría en el borde del área o en el último disparo, que parecía no llegar nunca.

Schreuder hizo un triple cambio para cambiar el sino del partido para su equipo, pero el Córdoba CF fue aumentando progresivamente su convicción en la victoria final. De hecho, el conjunto blanquiverde comenzó a acaparar cada vez más la posesión, al menos, en varias fases del encuentro en su segundo acto, algo que parecía apagar paulatinamente al Castellón.

Pero el gran partido del Córdoba CF no ocultaba que tenía muchos aspectos cogidos con alfileres. Por su parte, el Castellón se mostraba como un equipo que amagaba mucho, pero que no pegaba. Movía bien el balón, salía relativamente bien al contragolpe, pero siempre le faltaba el último pase o incluso el disparo. En definitiva, un Castellón falto de veneno.

Quizá por cómo estaban ambos equipos, Iván Ania pareció verlo claro. Sentó en el banquillo a Antonio Casas e introdujo en el campo a Recio. Toda una declaración de intenciones, además de sustituir a un lesionado Calderón -triunfante en su duelo con Manu Sánchez- y a Carracedo, extenuado. Schreuder introdujo a Gronning y Suero, pero el Castellón se transformó paulatinamente en un equipo que tan sólo salía al contragolpe, pero que no golpeaba. Moría siempre al borde del área del Córdoba CF.

Así, los últimos minutos fueron relativamente tranquilos para un Córdoba CF que tuvo controlado el duelo, un partido que había cambiado por completo con respecto a los primeros 45 minutos. De hecho, Iván Ania metió más «músculo» en la medular con Álex Sala, que fue el que sirvió de cabeza para que Simo Bouzaidi se marchara como una flecha hacia la portería de Gonzalo Crettaz, al que batió sin remisión cuando el reloj marcaba el minuto 90.

Un gol que ponía el colofón a un gran encuentro del Córdoba CF, tanto en el trabajo sin balón como en su capacidad ofensiva ante el líder del Grupo 2 de Primera Federación. Tres puntos para un Córdoba CF que recorta a la cabeza de la tabla y que se coloca a sólo cinco del hasta ahora favorito, el Castellón. Un Córdoba CF que cerró el 2023 en El Arcángel provocando el sueño del cordobesismo para el 2024.

Ficha técnica

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