La expresidenta de Invercaria Laura Gómiz declaró ayer al juez que investiga presuntas irregularidades en esa empresa pública que "nunca" ha ordenado realizar informes falsos sobre las inversiones ni intimidado a sus trabajadores para hacerlo. Gómiz declaró durante ocho horas ante el juez de instrucción 16 de Sevilla, a quien aseguró que lo que algunas personas interpretan como "informes falsos para justificar inversiones pasadas" fueron en realidad una aplicación informática nueva que ella puso en marcha para unificar toda la documentación de Invercaria. Reconoció, a preguntas del fiscal, que el organigrama de Invercaria incluido en el sumario no es el que enviaron a la Cámara de Cuentas, pues en el primero figuran trabajadores que prestaban sus servicios en lugar distinto a la sede de Invercaria.