Los alcaldes de las ocho capitales andaluzas --los principales representantes del poder institucional del PP-A-- viajaron ayer a Madrid para reclamar al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, una solución a la asfixia financiera de los municipios. Tras una "densa" reunión de dos horas, el ministro se comprometió a dar oxígeno a los ayuntamientos y a abordar la financiación local al mismo tiempo que la autonómica, aseguró el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido. El también líder del PP andaluz aprovechó para arremeter contra la Junta por no recibir a los regidores y por su "nula atención" a los consistorios.

El Gobierno tiene previsto analizar este año el modelo financiero de las comunidades y reformarlo cuando toca, en el 2014. De forma inminente, el Ejecutivo de Rajoy aprobará este viernes o el que viene la reforma de competencias de la administración local, diseñada para evitar duplicidades y lograr ayuntamientos más eficientes. Sin embargo, su apéndice, la nueva la financiación local, quedó nuevamente aparcada. La mejora financiera de los consistorios es una reivindicación histórica del municipalismo y, según explicó Zoido, ahora Montoro está dispuesto a abrir ese melón. El contexto es dificilísimo. El cumplimiento del severo objetivo del déficit no da margen al Gobierno para mejorar la inyección económica a los ayuntamientos. El PP ha celebrado el pasado fin de semana en Almería una cumbre local que iba a servir de broche a la reforma competencial de los ayuntamientos pero sus contenidos han pasado inadvertidos porque todo quedó empañado por el escándalo de los sobres de dinero negro que supuestamente repartió el extesorero Luis Bárcenas entre la cúpula popular.

COMPETENCIAS IMPROPIAS El alcalde de Sevilla no concretó demasiado las propuestas del ministerio en la rueda de prensa posterior a la reunión, pero dejó claro que la futura financiación posibilitará que los municipios puedan hacer frente a sus problemas de tesorería derivados de asumir competencias que no les corresponden (impropias) y de los impagos de otras administraciones. Son los grandes males de los consistorios. A finales de diciembre, Montoro cerró un acuerdo con el Gobierno andaluz para socorrer la asfixia financiera de cuatro ayuntamientos de distinto color político: Jerez, Barbate, La Línea y Los Palacios.