El líder del PA, Antonio Ortega, dijo ayer en Sevilla que "ahora toca la fase de anestesia local, de todo va bien, de contra el Gobierno central ni abrir la boca", en alusión a la confrontación y a la nueva etapa en la que el mismo partido, el PSOE, gobernará en Madrid y en Andalucía.

"Ahora ya no hay excusas, ya no hay enemigo en Madrid", dijo Ortega, para añadir que "Andalucía no necesita amigos ni enemigos, sino justicia" y recordar que hay que revisar las transferencias de Educación y Salud, liquidar la deuda por la financiación y hacer efectiva la deuda histórica, entre otras reivindicaciones andaluzas de los últimos años.

Ortega advirtió que el PA estará vigilante y seguirá exigiendo la eliminación del peaje de la autopista de Cádiz, la policía autonómica, las transferencias de las cuencas hidrográficas y que "lo de Irak no sea como lo de la OTAN, de entrada no y de salida tampoco", además de considerar inevitable la reforma del Estatuto de Autonomía, como inevitable consideró la reforma del modelo de Estado que se producirá en la legislatura que ahora comienza, que calificó de "constituyente".

LA CAMPAÑA Tras analizar los resultados electorales en la comisión nacional de su partido, Ortega afirmó que este órgano ha considerado positivo el resultado electoral por ser la primera vez que el PA ha crecido, lo que en su opinión demuestra que sus expectativas de mejorar eran reales "pese a las circunstancias de última hora, ya que ha habido dos campañas, hasta el jueves, y después del jueves", en alusión a los atentados de Madrid.

Ortega, que dijo que el PP "ha sido víctima de cuatro años de mala oposición y servidumbre al Gobierno central" y que IU "ha sido víctima de sí misma", aseguró que el PA se preparará ahora para ser alternativa de Gobierno en Andalucía.

Antonio Ortega dijo que él presidirá el grupo andalucista en el Parlamento andaluz, que José Calvo Poyato hará de portavoz y que, probablemente, Antonio Moreno podría ir a la mesa de la Cámara.