Más de 35.700 hectáreas que se encontraban en barbecho en Andalucía se han empezado ya a cultivar tras la ampliación a 2023 de la flexibilización de los requisitos de la Política Agraria Común para ponerlas en producción para hacer frente a la escasez de cereales como consecuencia de la guerra en Ucrania.

Esta extensión supone el 53% de las 66.000 hectáreas consideradas de interés ecológico en la comunidad autónoma andaluza, ha informado la Consejería de Agricultura en un comunicado.

Hasta este mes, la superficie en barbecho puesta en producción alcanza las 120 hectáreas en Almería; unas 8.800 en Cádiz; más de 4.600 en Córdoba; alrededor de 720 en Granada; aproximadamente 1.200 en Huelva; cerca de 650 en Jaén; casi 775 en Málaga, y más de 18.800 en Sevilla.

La consejera de Agricultura, Carmen Crespo, ha valorado este viernes dicha ampliación a 2023 y ha titular de agricultura ha animado al sector andaluz a "aprovechar la importante oportunidad" que supone esta medida de cultivar tierras en barbecho.

"Numerosos productores de Andalucía se han sumado ya a esta posibilidad pero aún hay margen para seguir sacando rendimiento a miles de hectáreas donde podría crecer, por ejemplo, el cereal y el grano que actualmente necesita Europa", ha apuntado en un comunicado.

Crespo ha apostado por poner en producción el máximo de superficie disponible para que los agricultores andaluces "aumenten la rentabilidad de sus explotaciones conservando las mismas subvenciones y contribuyendo, además, a que Europa alcance la suficiencia alimentaria".

Por otro lado, la consejera andaluza ha apuntado también que "los profesionales del sector agrario tienen demasiados retos a los que hacer frente como la escasez de recursos hídricos, los altos costes de producción y de la energía eléctrica o los bajos precios que reciben por sus productos", por lo que solicita al Estado que "interceda ante Bruselas para defenderlos".

La responsable de Agricultura se ha mostrado esperanzada en que "Europa escuche a unos agricultores y ganaderos que han demostrado con creces su implicación con la protección del entorno logrando que Andalucía sea un referente en producción ecológica donde cerca del 30% de la superficie agraria útil se cultiva bajo técnicas sostenibles".