La cooperativa agrícola La Unión, una de las entidades de referencia en la Denominación de Origen Protegida (DOP) Montilla-Moriles, ha iniciado este martes una vendimia que será «compleja» a causa de las elevadas temperaturas y del estrés hídrico que acumulan las vides del marco vitivinícola cordobés.

Así lo ha advertido el director-gerente de la entidad, Francisco Fernández, quien, en declaraciones a CÓRDOBA, detalló que las primeras variedades que se han empezado a recolectar son la moscatel y la chardonnay, ideales para la elaboración de vinos jóvenes sin crianza. 

«Desde el punto de vista sanitario, la uva se encuentra bien pero los daños que han provocado las altas temperaturas y la falta de agua están presentes», reconoció Fernández, quien advirtió que el personal de la cooperativa afronta una vendimia «muy difícil».

«Las primeras estimaciones para esta campaña no son muy buenas, ya que esperamos un descenso de la producción de entre el 20 y el 25 por ciento con respecto a la cosecha anterior», aseguró el gerente de La Unión, quien recordó que las viñas han sufrido «varias olas de calor y una falta de agua considerable», que han hecho que las cepas «estén muy resentidas».

Con todo, la entidad que desarrolla la mayor vendimia de toda Andalucía, ha inaugurado la primera «vendimia sostenible» de su historia, tras la puesta en marcha de dos nuevas plantas fotovoltaicas de autoconsumo.

Desde la pasada semana, tanto la sede administrativa de la cooperativa como las instalaciones ubicadas en la calle Río de la Hoz, en las inmediaciones de la estación de ferrocarril, cuentan con sendas plantas fotovoltaicas.

«Hoy en día no basta con elaborar y comercializar aceites y vinos de calidad sino que, además, debemos esforzarnos por hacerlo de manera sostenible», aseguró el director-gerente de La Unión, quien reiteró el compromiso de la cooperativa montillana por «tratar de frenar los efectos del cambio climático».

Las plantas fotovoltaicas, dotadas de más de 200 placas solares, «están produciendo energía eléctrica procedente del sol y, con ellas, seremos capaces de ahorrar cerca del 40 por ciento de los costes de la energía», aseguró Fernández. «De este modo, nuestra cooperativa está contribuyendo a reducir el impacto medioambiental que tanto daño está haciendo en nuestros cultivos y que, este año, están soportando temperaturas muy altas y ocasionando adelantos en las vendimias como nunca habíamos visto antes», aseveró el responsable de la entidad montillana.