españa está consumiendo ya casi tantas algas como marisco, de ahí el interés de conocer en profundidad las enormes posibilidades de este producto, que es protagonista de un libro de cuatro profesores de la Universidad de Cádiz, con recetas de 16 chefs que suman medio centenar de estrellas Michelin.

El libro ¿Las algas se comen? es «un periplo por la biología, la historia, las curiosidades y la gastronomía”, editado por el sello Editorial UCA, que ha sido presentado públicamente, y reivindica las algas como un tesoro gastronómico de enorme valor, de ahí que, además de recorrer la historia de las algas, reúna recetas de cocineros de gran nivel.

En esa lista están Andoni Luis Aduriz, Juan Mari Arzak, Martín Berasategui, Dani García, Pedro Subijana, Mario Sanvodal, Paco Roncero, Carme Ruscalleda y el gaditano Ángel León, quien ha participado activamente en la búsqueda de las recetas con algas de sus compañeros.

«Hay que sacar pecho por lo que está hecho en mi tierra para contar al mundo qué es lo que se hace en la Universidad y en la gastronomía», ha defendido un orgulloso León, quien se ha mostrado seguro de que este libro «será esencial en todas las escuelas de hostelería de España».

Y lo es, según Ángel León, porque permite descubrir muchos aspectos desconocidos de las algas, muchos de ellos desgranados en la presentación por José Lucas Pérez Lloréns, uno de los profesores que firma el libro, junto con Ignacio Hernández Carrero, Juan José Vergaray Fernando Brun Murillo.

«Las algas son raras porque hasta las mismas especies pueden tener morfología completamente diferente, pero de ahí su enorme potencial de colores y sabores», ha saludado con entusiasmo Pérez Lloréns, quien ha recordado que el libro recoge experiencia de más de 25 años de investigación y docencia de la Universidad de Cádiz. Una de las conclusiones de esta publicación es que las algas, al contrario de lo que se puede pensar, forman parte ya de la vida cotidiana de la gastronomía española. «En España se consumen 14 toneladas de algas al año, mientras que de marisco apenas llegan a 15 toneladas», pone como ejemplo el profesor Pérez Lloréns.