Mucho ruido y pocas nueces. Con ese refrán se resume la percepción de dos colectivos que tienen mucho que ver con la rehabilitación, los arquitectos y los aparejadores y arquitectos técnicos. El presidente del Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos, José Luis Luque, asegura que la rehabilitación "se queda en mucha publicidad y expectativas pero los resultados son prácticamente cero". El trabajo que llega "no es significativo", asegura, lo que agudiza más aún la caída de la actividad detectada desde antes de la crisis. Según los datos de visados de vivienda que maneja, de los 16.783 del 2006, se ha pasado a 801 en el 2013, es decir, un 95% menos, o, lo que es lo mismo, el 5% de lo que se producía antes de la crisis, que está "machacando" a este colectivo, señala, ya que la situación es de "catástrofe total". Estos porcentajes coinciden con los detectados por el Colegio de Arquitectos de Córdoba en sus estadísticas.

Luque piensa que antes de nada hay que llevar a cabo un "diagnóstico" de la situación de los edificios. Además, piensa que hay que impartir "una formación específica en rehabilitación", vital para "cambiar el sistema productivo de obra nueva a rehabilitación", y reducir el IVA, que contribuiría a potenciarla. Por último, lamenta que la revisión de edificios no se ponga en marcha, "parece que hasta que no haya una desgracia, no se hará".

Uno de los problemas que está encontrando es la competencia de ofertas de certificados energéticos a 75 euros, cuando el coste real ronda los 250 euros para un piso de 100 metros, teniendo en cuenta las "6 u 8 horas de trabajo mínimo, el seguro de responsabilidad civil, la cuota colegial, la amortización del ordenador...". En este sentido, alerta de "fraudes" en certificados que se realizan sin ir al piso. Luque considera importante controlar el consumo de energía en las viviendas y "educar al consumidor". En este sentido, asegura que zonas como el Parque Cruz Conde, Santa Rosa, Ciudad Jardín y Cañero tienen problemas de aislamientos.

Por su parte, el decano del Colegio de Arquitectos, Felipe Romero, asegura también que la rehabilitación es escasa y que lo más frecuente son las obras menores. En este sentido, señala que hay quienes "sacan permisos de obra menor y después realizan reformas mayores", circunstancia que se da, sobre todo, en los pueblos. En definitiva, de momento, "de rehabilitación, nada, no está solucionando la vida del sector".

El presidente de la Gerencia de Urbanismo, Luis Martín, también detecta que las actuaciones más predominantes en la capital son obras de carácter menor.

Tanto un colectivo como otro están pendientes de que el decreto estatal de vivienda dé sus frutos y de que la Junta ponga en marcha su plan. También esperan que la inspección de edificios dé resultados, aunque son conscientes de que el gran hándicap es económico, obstáculo tanto para propietarios como para la administración, que no puede llevar a cabo ejecuciones subsidiarias sin dinero.