La 'Operación Retorno' se cobró anoche una víctima mortal en la provincia de Córdoba al perder la vida un hombre de 47 años de edad en un accidente de tráfico que tuvo lugar en la N-420. Según informaron fuentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil, el siniestro ocurrió sobre las 21.15 horas de en la carretera que une los términos municipales de Cardeña y Montoro, a la altura del kilómetro 56. Por causas que se desconocían al cierre de esta edición, el vehículo, un todoterreno, se salió de la calzada y volcó, falleciendo en el acto su único ocupante.

Además, otras cuatro personas fallecieron en otros tres accidente mortales ocurridos hasta las 20:00 horas de ayer durante la operación especial de tráfico de retorno de vacaciones, entre el viernes por la tarde y las doce de esta noche, que transcurrió sin apenas retenciones.

Dos víctimas murieron en un alcance entre vehículos en la AP 7 a la altura de Sagunto (Valencia), otra por atropello en la misma autopista en Gata de Gorgos (Alicante) y una más en una colisión lateral en la N-630 en Camas (Sevilla). En esta se produjo un choque entre un camión y la motocicleta y falleció el motorista.

La DGT esperaba 4,2 millones de movimientos de vehículos en las carreteras durante estos tres días por coincidencia de los conductores que regresan del veraneo, ya que ayer fue el último día de agosto, los que comienzan las vacaciones en septiembre y los que viajan por ser fin de semana.

El verano pasado murieron 233 personas a causa de accidentes de circulación (entre el momento del siniestro y las 24 horas siguientes): 113 en julio y 120 en agosto. En julio pasado fueron 112, según la última actualización estadística de la DGT. El grueso de los desplazamientos previstos tenían como origen la zonas turísticas de costa y otras de vacaciones y destino en las grandes ciudades, aunque Tráfico esperaba que la vuelta fuera escalonada, con circulación más intensa ayer. El dispositivo de la DGT para estos días es de 10.000 agentes de la Guardia Civil, apoyados por más de 600 funcionarios y personal técnico especializado que atiende en los siete Centros de Gestión de Tráfico. Entre las medidas se seguridad se contemplaban controles de alcohol y drogas en cualquier tipo de vía y a cualquier hora y vigilancia especialmente del cumplimiento de los límites de velocidad, sobre todo en carreteras convencionales.