El buen tiempo reinante, una jornada más, sacó a miles de personas a la calle para disfrutar del Lunes Santo en los pueblos, con numerosos estrenos en las hermandades que hacen que cada año vaya creciendo tanto en cofrades como turísticamente.
LUCENA
Pasión
El Lunes Santo lucentino contó con la salida desde el Llanete de San Francisco de las tres procesiones de la Cofradía Franciscana de Pasión. Desde la conventual iglesia de los Franciscanos salió esta cofradía con las procesiones de Jesús Cautivo de Medinaceli, que fue mandada por Jesús López Román; María Santísima de las Angustias lo hacía con su manijero, Sergio Jiménez Durán, y la Virgen de la Pasión y Animas lo hacía con su manijero, Jesús García Cabeza. El desfile procesional contó con la participación de la Agrupación Musical del Santísimo Cristo de la Humillación-Servitas de Lucena. Un año más lucentinos y visitantes pudieron admirar el magnífico trono de Nuestro Padre Jesús Cautivo de Medinaceli , considerado uno de los mejores de la Semana Santa local.
PUENTE GENIL
El nuevo paso de la Cena
La Cofradía Sacramental de la Sagrada Cena de Jesús y María Santísima del Amor, una de las más populares de Puente Genil, con más de 1.400 hermanos, presentó uno de los grandes estrenos de la Semana Santa Local, el nuevo paso de la Cena. Para esta salida se estrenó la nueva parihuela y canastilla diseñada por el sevillano Antonio Ibáñez y los trabajos de carpintería por parte del rambleño Manuel Torres García. Un nuevo paso que viene a sustituir al barroco utilizado hasta ahora debido al agravamiento de las deficiencias de estructura del paso que habían provocado un desplazamiento de una de las zancas.
Para buscar una mayor proporcionalidad con todo el grupo escultórico, el paso se ha ampliado tanto de largo como de ancho, quedando con unas dimensiones de 2,70 por 5,10 metros. Sin embargo, continuará calzado por el mismo número de costaleros (54). La iniciativa la tomó la junta de gobierno, en quien delegó la hermandad presidida por el Cofrade Mayor, Alfonso Morales.
Este estreno vino acompañado de otro cambio estético significativo, la disposición del Señor y algunos apóstoles. En concreto, se avanzó la imagen del Cristo quedando por detrás de él las figuras de San Judas y San Bartolomé, de manera que la imagen del Cristo es mucho más visible desde cualquier posición.
La salida de la iglesia de San José, el paso por la calle Santos --donde se ubica su casa de hermandad-- y la subida espectacular de la Cuesta Baena fueron los momentos más emotivos del recorrido.
MONTILLA
El Cristo del Perdón
La hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores volvió a cargar de sentido cofrade la noche del Lunes Santo de la mano del Santísimo Cristo del Perdón, un hermoso crucificado atribuido al retablista Cristóbal de Guadix que, como novedad, recorrió las calles de Montilla con el acompañamiento de la Banda de Música Montillana Pascual Marquina.
CABRA
Largas filas de nazarenos
Los pasos del Cristo del Calvario y de Nuestra Señora del Rosario recorrieron en la noche de ayer su habitual itinerario desde la iglesia de Nuestra Señora de los Remedios por las calles del centro urbano de Cabra, acompañados por largas filas de nazarenos de negro con escapulario violeta y cíngulo oro. Un cortejo que abrió la imagen del Cristo, obra anónima del siglo XVI, acompañado de la Virgen de la Concepción de Luis González Rey. Tras él, el paso de palio de la Virgen del Rosario, obra del egabrense Salvador Guzmán, acompañada por la Banda Sinfónica Municipal de la localidad granadina de Ogijares y el primero por la agrupación musical Santa Cecilia de Aguilar de la Frontera.
Más tarde salió, a eso de las 22.00 horas, de la iglesia de la Asunción y Angeles, el Cristo de la Sangre, talla anónima de crucificado de la primera mitad del siglo XVII que, como cada año, volvió a sobrecoger al público al envolver su imagen la noche con el sonido ronco del tambor enlutao, realizando su Via Crucis por las estrechas calles del barrio del Cerro, acompañada en lo musical por el cuarteto de capilla de la cofradía con la colaboración de la Banda de Música de Cabra.
PRIEGO
La Buena Muerte
Una gran cantidad de público volvía a congregarse en el Calvario para presenciar en directo la salida procesional de las imágenes titulares de la cofradía de María Santísima de los Dolores y el Santísimo Cristo de la Buena Muerte. Un desfile en el que volvían a repetirse imágenes de gran belleza durante el paso de la amplísima comitiva por las estrechas veredas que conducen al Gólgota prieguense, de manera particular en las maniobras que los costaleros de María Santísima de los Dolores tienen que realizar en las numerosas curvas de este tramo del itinerario. Algo más de tres horas después de su salida, la cruz de guía alcanzaba la parroquia de la Asunción, templo desde donde los titulares de la cofradía regresarán a su ermita en la madrugada del próximo Viernes Santo, en la conocida como Vía Sacra o procesión del silencio.
BAENA
Miserere
La Unica Cuadrilla de Judíos Arrepentidos, Enlutaos, celebró ayer miserere en Baena, junto a distintas hermandades de la cofradía del Dulce Nombre de Jesús, Santo Cristo del Calvario y Soledad de María Santísima. En esta ocasión iniciaron el desfile en el paseo de Guadalupe y, tras recorrer las calles de costumbre, acudieron a las 22.00 horas al miserere que se celebró en la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe. Es la primera vez que los judíos de la cola blanca hacen su aparición desde la Semana Santa del pasado año y lo hacen completamente uniformados. Además, participó la hermandad de la Veracruz, del Cristo de la Sangre, la centuria romana de Nuestra Señora de las Angustias y hermandad de San Juan.
POZOBLANCO
Silencio en Santa Catalina
La cofradía de Nuestro Padre Jesús del Silencio Amarrado a la Columna y María Santísima de la Salud salió anoche por las calles de Pozoblanco, en una jornada en la que numerosas personas no quisieron perderse el paso de las dos imágenes de la cofradía por los rincones de Pozoblanco y, en especial, la salida y entrada en su templo --la ermita de San Gregorio--; la costanilla Risquillo o la estación de penitencia en el interior de la iglesia de Santa Catalina. El paso del Cristo estuvo acompañado por la Agrupación Musical Santo Tomás de Villanueva de Ciudad Real y el de la Virgen por la Banda de música Santa Cecilia de Pedroche.
PALMA DEL RIO
Silencio
El Lunes Santo se traduce en silencio y recogimiento en una estación de penitencia que discurre en Vía Crucis. La hermandad de Penitentes del Santísimo Cristo de las Aguas, cuyo paso por la iglesia del viejo Hospital de San Sebastián se ha convertido en esta Semana Santa 2015 en cartel anunciador, reunió a un gran número de fieles y devotos que se acompañaron en el rezo de las 14 estaciones de penitencia tan solo por el sonido de una campana. Cuatro ciriales de madera acompañan la imagen del crucificado, llevado por 8 portadores.
DOÑA MENCIA
Máximo esplendor del Huerto
La cofradía de Jesús en su Oración en el Huerto de los Olivos y Nuestra Señora de la Consolación y Paz procesionaron por las calles mencianas con su máximo esplendor. El desfile alcanzó su momento más álgido cuando a la finalización del mismo se recreó el Prendimiento. La cofradía de los pregoneros y rezaores de la localidad acompaña con sus característicos cánticos. La Virgen de la Consolación y Paz es portada en su totalidad por mujeres.
MONTORO
Vía Crucis
El traslado del Cristo de la Misericordia partió desde la iglesia de San Bartolomé para dirigirse hasta la de San Sebastián, entrando en el templo a las 23.30 horas, no sin antes realizar las catorce estaciones en puntos clave del recorrido, como el Arco de la Cárcel o las Tercias Catedralicias. Este Vía Crucis se celebra desde el año 1980. Durante el recorrido le acompañaba música de capilla.
CAÑETE
Procesión de luto
Anoche fue la tercera salida del Santísimo Cristo del Calvario, que partió de la iglesia de la Asunción. Esta procesión de luto y recogimiento estuvo acompañada por un gran número de penitentes y está llamada a convertirse en una de las más sentidas de la Pasión cañetera. Le acompañaba el canto gregoriano de la Coral Polifónica Pedro Lavirgen, de Bujalance.
