El Ayuntamiento desmantelará los almacenes con los que la empresa mixta Aguas de Montilla cuenta en la calle Juan Colín, a las espaldas de la iglesia de San Agustín, según anunció el alcalde de la localidad, Rafael Llamas.

La nueva ubicación de los almacenes representaría el último paso en un largo litigio que arrancó hace varios años cuando un vecino de la calle Juan Colín, Manuel Almedina, denunció las molestias que le provocaba la actividad desarrollada por los operarios y por la maquinaria de la empresa municipal encargada del suministro de aguas. En vista de que los ruidos seguían sucediéndose en el solar donde Aguas de Montilla almacena vehículos, maquinaria y materiales, el afectado se dirigió al Defensor del Pueblo Andaluz para que mediara en un problema que, a su juicio, afectaba la salud de su familia.

Tras una serie de alegaciones interpuestas por el Ayuntamiento y por el propio afectado, el gabinete que encabeza Jesús Maeztu reconoció que, "de forma indubitada", la actividad de Aguas de Montilla en los depósitos de Juan Colín genera ruidos, dado que el solar "presenta unas circunstancias en las que las ondas sonoras generadoras de ruido se propagan fácilmente".

Según apuntó el alcalde, deberá ser el nuevo consejo de administración de Aguas de Montilla el que determine si los almacenes se trasladan a unas instalaciones municipales o si es necesario alquilar algún espacio de propiedad privada.

En cualquier caso, Rafael Llamas quiso trasladar un "mensaje de tranquilidad a los vecinos", haciendo hincapié en que el nuevo equipo de gobierno "está pendiente de este asunto para tratar de que los almacenes se puedan trasladar definitivamente y, a ser posible, antes de final de año".

De esta forma, el Ayuntamiento ha mostrado su disposición a atender las recomendaciones del Defensor del Pueblo Andaluz, que en varias ocasiones ha instado al Consistorio a trasladar a otro lugar las instalaciones.

No en vano, un estudio acústico desveló que la actividad de Aguas de Montilla en su almacén superaba los límites del Reglamento de Protección contra la Contaminación Acústica en Andalucía.